Animada road movie sobre la familia, la amistad y la diversidad |
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Es esta coproducción europea un nuevo acercamiento a mostrar ideas ya vistas desde la perspectiva de la animación en cintas Disney como Tarzán y El libro de la selva. Una visión más que nos habla de la adopción, crecimiento, el paso a la madurez o el sentido de la pertenencia desde el punto de vista de un protagonista con crisis de identidad.
En esta ocasión encontraremos a un pequeño gorrión huérfano, Richard, que es adoptado por una cigüeña en contra de la opinión del líder de la bandada. ¿Os suena este comienzo, verdad?.
Con la llegada inminente del invierno, las picudas aves tienen que emprender su migración desde Alemania hasta África, cosa que un pequeño gorrión es imposible que acometa, pero su determinación y perseverancia lo embarcarán en un particular viaje en el que conocerá a otros variopintos animales cuya amistad hará que para el pequeño Richard la travesía emprendida le enseñe a descubrirse a sí mismo y el sentido de su vida.
Nada nuevo, como podéis apreciar por lo contado, para ofrecernos en pantalla grande un sencillo entretenimiento con momentos emotivos, de acción y bastante humor, además de algunas buenas enseñanzas para los más peques, así como para los más talluditos, que al fin y al cabo es lo que se le pide a una cinta de estas características.
El apartado musical corre a cargo de Éric Neveux, compositor que personalmente descubrí con la también reciente Cézzane et moi, banda sonora que para mí fue toda una sorpresa por la belleza de su música y lo bien trabajada que estaba, lo cual ya me hizo “quedarme con la matrícula” del compositor francés afincado en Los Angeles.
Para esta Richard the Stork, el compositor ha creado un score sinfónico muy rico en melodías y con temas asociados a cada personaje importante de la historia, en el que encontraremos tracks que nos llevan desde lo puramente emotivo a la acción más desenfrenada y épica pasando, cómo no, por los momentos cómicos que una historia como esta conlleva. Y todo este viaje musical ya queda patente en los primeros cortes del CD: “Flying Fun” y “Richard the Stork”, destacando este último por cómo está retratado con la música el nacimiento del pequeño gorrión y su primer encuentro con la que él cree su madre.
A partir de aquí la partitura se va desarrollando en torno a personajes y la aventura que les espera, con un carrusel musical que es toda una delicia, topándonos con temas tan divertidos como «The Sparrow Can Stay”, “Bat Chase” o “Kiki the Entertainer”, tema asociado al periquito que le acompaña en la aventura, «Bad Kiki VS. Good Kiki” o el fantástico “Birds” con acordeón y guitarra eléctrica como protagonistas, los cuales quedan que ni pintados en el contexto de la escena a la que acompañan.
En cuanto a acción hay que destacar sin dudar “Richard in Danger”, tema que atrapa desde el principio con un uso de las cuerdas y metales que nos sumerge de lleno en la persecución a la que se ve sometido el pequeño protagonista y que nos recuerda a grandes temas escuchados en scores de los años 90 y de la pasada década.
Pero a mi gusto, donde más se disfruta este score es en los temas dedicados a personajes y sentimientos y, aparte del ya mencionado al principio track asociado al protagonista, hay temas realmente buenos como “Lonely Richard”, en el que queda patente a partes iguales el sentimiento de soledad del pajarillo, así como su determinación a no dejarse vencer; “Aurora and Claudius” y su claro aire a composiciones de John Powell en este tipo de cintas, así como los más sentimentales “Give Me Back My Family”, “The Truth” o el estupendo “Finale”, que vuelve a hacer uso del tema de Richard de una manera estupenda para ir in crescendo hasta su precioso final cargado de emotividad con las notas de las cuerdas y el piano.
Como broche a esta edición en CD mencionar que también aparece la canción que aparece en los títulos de crédito, «We´re Coming Home”, interpretada por Stacey King, tema muy Timberlake que casa a la perfección con el tono de la cinta.
Una vez más para finalizar, el agradecimiento a José María Benítez que, a través de su sello Quartet Records, nos descubre músicas tan fantásticas como esta. No os perdáis por nada del mundo su escucha, pues la vais a disfrutar de cabo a rabo, dejando patente la calidad que atesora Neveux como compositor.
LO MEJOR: La riqueza de la música otorgándole más luminosidad si cabe a una cinta animada.
LO PEOR: Ese aire a Powell en algunos de sus pasajes.
EL MOMENTO: “Flying Fun”, “Richard the Stork” y “Finale”.
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