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  Brave

(Indomable)
Patrick Doyle
     
Año:   2012
Sello:   Walt Disney Records
Edición:   Normal
Nº Tracks:   20
Duración:   65:35
     
Ficha IMDB
 
Web del Compositor
 
 

Reseña por:
Óscar Giménez

 
1. Touch the Sky (02:31)
(performed by Julie Fowlis)
2. Into the Open Air (02:41)
(performed by Julie Fowlis)
3. Learn Me Right (03:46)
(performed by Birdy with Mumford
& Sons)
4. Fate and Destiny (04:17)
5. The Games (01:53)
6. I Am Merida (02:23)
7. Remember to Smile (02:18)
8. Merida Rides Away (04:07)
9. The Witch’s Cottage (04:26)
10. Song of Mor’Du (02:18)
(performed by Billy Connolly & Cast)
11. Through the Castle (04:34)
12. Legends Are Lessons (04:06)
13. Show Us the Way (03:46)
14. Mum Goes Wild (03:25)
15. In Her Heart (02:36)
16. Noble Maiden Fair (A Mhaighdean Bhan Uasal) (02:37)
(performed by Emma Thompson and Peigi Barker)
17. Not Now! (03:34)
18. Get the Key (03:15)
19. We’ve Both Changed (05:30)
20. Merida’s Home (01:32)
 
 

Tema principal en «Merida’s Home»

Canción de cuna en «Noble Maiden Fair (A Mhaighdean Bhan Uasal)»

«Song of Mor’Du»

 


La forma en que Patrick Doyle ha sabido combinar la música celta con la orquesta sinfónica, logrando temas bellos y vibrantes.


Algunas piezas y fragmentos atmosféricos como “I Am Merida” se hacen algo más indigestos en la escucha aislada, lo mismo que el mickeymousing que abunda en cortes como “Through the Castle” y parte de “Not Now!” y “Get the Key”, pese a que son perfectos en su sincronización con la acción de la película.


“We’ve Both Changed”, pieza para el clímax de la película con una primera parte de acción espectacular y un posterior desarrollo mágico de los dos temas principales de la banda sonora.

 

BSOSpirit opina

Nota media: 8
 
David Doncel (9), Rubén Franco (8), Asier G. Senarriaga (8), Óscar Giménez (9), Ignacio Granda (6), David Martínez (8), Sergio Rivas (8), David Saiz (8), Jordi Vázquez (8)
 

 

 
  alt  
 
 
Puro sabor escocés
     

altDespués de algo más de década y media triunfando en el cine de animación por ordenador, con historias divertidas y originales protagonizadas por juguetes, bichos, monstruos, coches, ratas o superhéroes en horas bajas, Brave es la película de Pixar que más se acerca a las premisas clásicas de Disney.

Su protagonista es Merida, una princesa escocesa de carácter rebelde que no quiere tragar con las costumbres de su familia real, que la obliga a escoger pretendiente a una edad demasiado precoz para su gusto. Tras rechazar a los herederos de los tres clanes que rinden pleitesía a su padre, el rey Fergus, Merida se enfada con su madre, Elinor, huye al bosque y provoca un maleficio que no trae nada bueno ni para su familia ni para su reino.

altLa película desprende ternura, aventura, acción, misterio, humor y emoción, pero está un paso o dos por detrás de casi todo lo que nos ha ofrecido Pixar hasta la fecha. Es sintomático saber que la directora inicial, Branda Chapman, que cuenta en su currículum haber dirigido El príncipe de Egipto en 1998, fue sustituida a mitad del proyecto por Mark Andrews, aunque los dos figuran en los créditos como directores. La acogida de la crítica ha sido correcta pero no excesivamente entusiasta. Brave entretiene pero no asombra, algo que la sitúa probablemente como una de las más olvidables, si no la que más, de las producciones de Pixar hasta la fecha.

Un nuevo compositor para Pixar

En proyectos anteriores, la gente del estudio fundado por John Lasseter ha contado con  Randy Newman, Michael Giacchino y Thomas Newman para el apartado musical. Brave representa la incorporación de un nuevo compositor al grupo de elegidos, Patrick Doyle, cuyo origen escocés y el respeto y admiración que siente hacia sus raíces culturales lo convertían desde el principio en una elección tan lógica como acertada.

altDesde luego, ser escocés no tiene por qué ser condición sine qua non  para escribir buena música para una película sobre Escocia. Ahí tenemos el ejemplo del Braveheart de James Horner. No obstante, para el proyecto de Brave se tuvo muy en cuenta el asunto de los orígenes. Los paisajes, los cielos o la luz constituyen una magnífica representación visual de las Highlands. Gran parte del elenco que puso voces a los personajes son escoceses de pura cepa, desde Kelly McDonald (Merida) a Billy Connolly (rey Fergus) y Robbie Coltrane (Lord Dingwall), este último buen amigo de Patrick Doyle, quien incluso presta su voz a uno de los guardias del castillo. Emma Thompson (reina Elinor) y Julie Walters (la bruja) no son escocesas, pero también han trabajado con el compositor desde hace muchos años. Sin ser determinantes, todas estas circunstancias conducían a que Doyle tuviera casi todos los números para acabar uniéndose a Pixar en este proyecto en concreto.

De hecho, se involucró en él hace más de tres años, tiempo en el que fue conociendo el desarrollo de la historia, hasta el punto de que algunos temas o esbozos de temas ya estaban escritos desde hace tiempo, como la canción de cuna “Noble Maiden Fair”, que constituye uno de los temas principales del score, y la canción de taberna “Song of Mor’Du”.

altDebemos recordar que no es la primera vez que Doyle se embarca en un largometraje animado, un género en el que, dado su carácter extrovertido, es fácil imaginarlo disfrutar a gusto a la hora de escribir música. Su primera película de animación fue Quest for Camelot (1998). En aquel tiempo le habían diagnosticado una leucemia que a punto estuvo de costarle la vida. Doyle compuso parte de aquel score en su cama del hospital, con calma y en la medida que sus fuerzas le dejaban. En cualquier caso, nos dejó temas memorables, aunque el film no tuviera más que una discreta repercusión. Su otra película de animación es Igor, producción que pasó con más pena que gloria por las pantallas, pero que contó con una banda sonora más que aceptable.

altSu grado de implicación en Brave es mayor que en esas dos películas y el resultado también es superior. La música de las dos superproducciones en las que trabajó el año pasado, Thor y Rise of the Planet of the Apes, recibieron algunas críticas en el sentido de que el compositor había optado por sonoridades más modernizadas, melodías más facilonas y con mucha percusión electrónica. Es cierto, aunque como él dice, su trabajo forma parte de un todo global y el compositor es un profesional que debe adaptarse a las exigencias de directores y productores.

Sin embargo, en el caso de Brave declara que ha tenido libertad absoluta. Aunque por un lado ha respetado la idea de crear música moderna y, podríamos decir, asequible a toda clase de oídos, ha hecho un gran trabajo con la instrumentación celta, con gaitas de distintas procedencias –escocesas e irlandesas, sobre todo-, whistles, fiddle y tambores de muy diversos tipos y materiales. Y además, ha sacado partido de la orquesta, tanto a lo grande como en pequeñas formaciones instrumentales que se grabaron por separado. En todos estos fragmentos, el compositor saca partido de su formación clásica y de ese buen hacer, sencillo y complejo al mismo tiempo, que aprecian los aficionados, especialmente, de sus trabajos de los noventa, desde Henry V y Dead Again hasta Frankenstein, Hamlet o Sense and Sensibility.

altTemas para una princesa sin príncipe

La banda sonora de Brave tiene tema principal, pero no toma suficiente cuerpo hasta bien entrado el disco. Hay una breve referencia a la primera frase de la melodía en “Remember to Smile”, pero no encontramos un desarrollo más largo hasta “Legends are Lessons”, interpretado primero por la gaita (2:38) y finalmente con toda la orquesta. Su desarrollo más emotivo lo podemos escuchar al final de “We’ve Both Changed”, después del clímax del film para cerrar la película.
 

“Merida’s Home”, variación corta de este mismo tema con whistle, orquesta y percusión celta, recoge este tema principal, aunque no se utiliza en la historia de la película en sí, solamente para los créditos finales. En la película podemos oír una variante más lenta y majestuosa, cuando los lores de los clanes se acercan en barco al castillo de Fergus, pero no se ha incluido en la edición discográfica.

El otro tema que tiene más representación en la película, y que comparte un fragmento de la melodía del tema principal, es el de la canción de cuna que simboliza el vínculo entre Merida y su madre Elinor. De hecho, es el primero que se oye en la película. Se emplea en la escena introductoria del film, en la que una Merida más niña juega con su madre, música que no se ha incluido en el CD. Su melodía es la de la canción “Noble Maiden Fair (A Mhaighdean Bhan Uasal)”, con letra del hijo de Patrick Doyle e interpretada en gaélico por Emma Thompson y la niña Peigi Barker. Es una canción de cuna tierna, que destila esencias celtas y que se utiliza en los momentos más emotivos del tramo final de la película.
 

alt“Legends Are Lessons”, uno de los mejores cortes del disco, pero también uno de los que no se ha utilizado en la película al completo, dedica su primer minuto a un bello y triste tema de cuerdas armónicamente basado en esta canción de cuna. En algún momento incluso recuerda a Nouvelle-France. En la misma pieza, Doyle recupera al final este tema de la relación entre madre e hija, interpretado por el fiddle.
 

Apenas esbozado con metales amenazadores y luego con whistle, lo encontramos también en “Mum Goes Wild”, lo mismo que en “In Her Heart” con fiddle.

Además de en “Noble Maiden Fair (A Mhaighdean Bhan Uasal)”, su presentación más desarrollada y emocionante tiene lugar en la escena clímatica que se recoge en “We’ve Both Changed” (3:06). Primero es un fiddle solista el que interpreta la melodía y después la voz femenina, con un carácter mágico que parece lejano y va creciendo y acercándose antes de desembocar en la ejecución del tema principal.
 

altOtro de los temas destacados de la partitura es una animada giga que escuchamos al poco de iniciarse en “Fate and Destiny”, el primer corte del score que se incluye en el CD. En la película suena después de la escena de introducción en que veíamos a la princesa cuando era una niña pequeña y asistía al enfrentamiento de su padre con el mítico oso Mor’Du. Después vemos el título de la película y escuchamos la voz en off de Merida hablando de su tierra, con un plano aéreo que se dirige hacia el castillo de su familia. La giga comienza a sonar cuando vemos a su padre y a sus hermanos pequeños haciendo travesuras en el castillo. La volvemos a encontrar al inicio de “The Games”, la competición de tiro con arco en la que participan varios pretendientes.
 

alt“Song of Mor’Du”, canción dedicada al relato de cómo el rey Fergus peleó con el demoníaco oso y perdió su pierna, se escucha casi de pasada en una escena en la que el rey y los lores se divierten en el castillo.
 

No obstante, su melodía forma parte de diversos fragmentos de “Through the Castle”, cuando Fergus y compañía corren por el castillo a la caza de un oso. Es un tema de carácter cómico, muy dinámico y con muchos pizzicatos y mickeymousing, sincronizando la música con muchos golpes de efecto y correrías que se suceden en la pantalla. Divertido y muy ajustado a la imagen, aunque es una de esas piezas con tantas interrupciones en su desarrollo que dificultan el disfrute de su escucha aislada.

altAún podríamos hablar de otro tema, una frase que suena un par de veces asociada al conjuro que hace la bruja del bosque a petición de Merida. Se puede escuchar un par de veces en “The Witch’s Cottage” y que, por cierto, recuerda bastante al tema del Cáliz de Fuego de Harry Potter and the Goblet of Fire.
  

La buena música de Brave no se limita a los leitmotivs expuestos. Además de la vibrante giga de “Fate and Destiny”, encontramos otra que suena en la segunda mitad de “Remember to Smile”, aunque parece que no se utilizó en el film.
 

Las sonoridades celtas con aire de danza algo más calmada tienen su presencia al final de “The Games”, así como en algunos pasajes de “Legends Are Lessons” y “Mum Goes Wild”.

La música de acción también brilla en la partitura, con algunos pasajes en los que el compositor demuestra su capacidad para crear música desbordante. Uno de esos momentos lo tenemos en “Merida Rides Away”, a partir de 0:40, cuando la chica escapa del castillo tras enfadarse con su madre. Es un fragmento corto, pero es puro Doyle.
 

altLas cuerdas también desarrollan un intenso ostinato en “The Witch’s Cottage” (3:00) y vuelven a desbocarse, junto con los metales y la percusión en el tramo final de “Show Us the Way”, fragmento en que emplea elementos similares a los de «The Creation», de Frankenstein.
  

También encontramos música de acción en “Not Now!”, una pieza con abundancia de sincronizaciones respecto a la imagen en su primera mitad, pero que se desenvuelve mejor en la segunda. Algo parecido ocurre con “Get the Key”, que tiene varios momentos potentes y emocionantes, acompañando la acción de la huida de Merida por el castillo con la ayuda de sus hermanos.
 

altEn cualquier caso, la segunda mitad de “Get the Key” y todo el siguiente corte, “We’ve Both Changed”, constituyen el clímax de la película y de la banda sonora. La acción dramática, con instantes de gran fuerza expresiva, ocupa los primeros compases de este último track, con el enfrentamiento final con Mor’Du y la posterior resolución de la historia.
 

No falta música intrigante y atmosférica, como la que se escucha en “I Am Merida”, la tenebrosa segunda mitad de “Merida Rides Away” y los compases de inicio de “Show Us the Way”.

Por último, en lo que al score se refiere, son de destacar algunos momentos melódicos que destacan por su tono emotivo. Uno ya lo he comentado antes, es el bello comienzo de “Legends Are Lessons” que parece basado en la canción de cuna y recuerda fácilmente a algunas melodias de Nouvelle-France.
 

Asimismo, es de destacar el que acompaña la escena en que Merida habla con su caballo el poco de comenzar el film, quejándose de su situación, y que podemos escuchar al final de “Fate and Destiny”. Las cuerdas evolucionan de forma triste hasta alcanzar un bonito crescendo final.
 

Otro de esos momentos es el inicio de “In Her Heart”, con whistle solista, utilizado para un discurso de Merida ante los lores y que enlaza con el tema de la canción de cuna.
 

altPor lo que respecta a las tres canciones ajenas a la labor de Patrick Doyle, las dos que interpreta la escocesa Julie Fowlis se utilizan en la propia película. “Touch the Sky” suena cuando vemos a Merida cabalgar y disparar con el arco en una de sus salidas al bosque y a las montañas. Es una canción con buen ritmo y que emplea parcialmente instrumentación celta, enfatizando el coraje y el dinamismo de la protagonista. “Into the Open Air” es más intimista y acompaña escenas de la chica y su madre en el bosque, con algunas imágenes bastante divertidas. Tampoco está mal.

altLa otra canción, “Learn Me Right”, interpretada por la británica Birdy con Mumford and Sons, únicamente se escucha con los créditos finales. Se trata de otro tema rítmico que evoca en cierto modo el sonido de U2, con esa característica guitarra infinita al estilo de The Edge, y con algún solo de violín que le confiere carácter folk.

La conclusión es que estamos ante uno de los mejores trabajos de Patrick Doyle de los últimos años, una banda sonora en la que ha tenido libertad para crear y disfrutar. No es una partitura que se disfrute por completo de principio a fin, ya que incluye tramos más ambientales y algunos pasajes de excesiva sincronización con la imagen que lastran un poco la escucha aislada. Aparte de esos momentos, hay muy buena música que destaca en su vertiente más dramática y emocional. Por lo tanto, la elección de Doyle para un film tan escocés como Brave ha resultado todo un acierto.