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  28 Days Later

28 días después
John Murphy
     
Año:   2003
Sello:   Beggars Xl Recording
Edición:   Normal
Nº Tracks:   23
Duración:   44:50
     
Ficha IMDB
 
Web del Compositor
 
 

Reseña Por:
David Doncel

 
  1. The Beginning (2:56)
  2. Rage (1:22)
  3. The Church (1:16)
  4. Jim’s Parents (Abide With Me) (2:29)
  5. Then There Were 2 (0:42)
  6. Tower Block (1:26)
  7. Taxi (Ave Maria) (2:08)
  8. The Tunnel (1:40)
  9. AM 180 – Grandaddy (3:20)
  10. An Ending (Acent) – Brian Eno (4:17)
  11. No More Films (0:48)
  12. Jim’s Dream (0:40)
  13. In Paradisum (2:11)
  14. Frank’s Death-Soldiers (Requiem In D Minor) (2:39)
  15. ‘I Promised Them Women’ (1:24)
  16. The Search For Jim (2:41)
  17. Red Dresses (0:48)
  18. In The House-In A Heartbeat (4:16)
  19. The End (1:55)
  20. Season Song – Blue States (4:12)
  21. End Credits
  22. Season Song (Rui Da Silva Remix)
  23. Taxi (Ave Maria) (Jacknife Lee Remix)
 
 
 


Brian Eno, y el momento más evocador de la película.


La canción de Grandaddy, AM 18, en el supermercado, pegadiza, pero un tanto ridícula, muy alejada del conjunto musical.


An Ending (Acent) de Brian Eno.

 
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28 días en Zombieland
 

 

Richard Matheson, el último genio vivo sobre la tierra

Richard MathesonHablar de Richard Matheson es para mi todo un placer pues puede ser uno de los escritores más influyentes en este siglo XX, el que más en el terreno de la ciencia-ficción junto al gran Ray Bradbury, un tanto más recargado éste último. Matheson es un escritor que ahonda en las raíces de la naturaleza humana, por más que sus planteamientos sean argumentos ficticios de rotunda fantasía. Matheson desgarra la soledad, la locura, el espíritu en momentos tan escalofriantes como esa historia de una pasajero que ve a un monstruo destrozar el motor del avión en el que viaja, o tan inolvidables como aquel personaje que muere y vive inmerso en los cuadros de su mujer.

 

El Increíble Hombre Menguante Serve Man

Matheson revolucionó su tiempo con historias cortas que posteriormente convertiría en relatos, en historias inolvidables para una no menos inolvidable serie: The Twilight Zone (En los limites de la realidad). Allí no sólo realizó ese relato anteriormente comentado sobre un William Shatner que vive atormentado por la aparición de un ser monstruoso (aunque parezca más bien un Teletubbie) en un avión, sino 16 historias a cual más conseguida (las mejores de la serie). Matheson escribiría un libro que sirvió para llevar a la pantalla una de las películas de culto con más tirón y reivindicación posterior, El Increible Hombre Menguante. Una nube en forma de brisa marítima cubría a nuestro personaje, quien sufriría una catastrófica disminución de su tamaño, algo que nos regaló una de las mejores escenas de la historia del cine, la lucha del hombre contra la araña. Fue su primera película en la que intentaría introducirse como escritor con el fin de no perjudicar excesivamente un libreto original, que más que nadie él conocía.

El 'terrible' duende de 'Nightmare at 20,000 Feet'Eso le llevó definitivamente a su consagración en la fantástica serie The Twilight Zone, una serie de historias cortas, siempre relacionadas con un hecho sorprendente cuando cualquier personaje accede accidentalmente a esa zona donde el tiempo se para y las características naturales no son las convencionales. Escribió un total de 16 episodios (los mejores), hoy todavía clásicos, uno de ellos, «Nightmare at 20,000 Feet», reutilizado en la irregular película del 83 producida por Spielberg, y dirigida por él mismo, John Landis, Joe Dante y George Miller, siendo éste último el que sustituyó a Richard Donner (director del episodio original) en la dirección de la historia de Matheson.

Twilight ZoneDespués le seguirían colaboraciones con el rey del bajo presupuesto, Roger Corman. Así, tenemos tres películas como The House of Usher, The Pit and the Pendulum, y The Raven, todas ellas historias literarias escritas por el clásico Edgar Allan Poe. Supongo que Corman, en un primer momento, buscó a un escritor que estuviese relacionado con el mundo del cine, y además tuviera ciertas simpatías por los clásicos. Creo que el nombre de Matheson era una elección sin duda acertada.

 

 

The Pit and the Pendulum Un jovencito Jack Nicholson en 'The Raven'

Spock y Kirk, universalesStar Trek también fue una serie que se aprovechó de los guiones del genial Matheson, muy próximos a la forma de trabajar de The Twilight Zone, pero con una cantidad impresionante de fans detrás de esta idea que a día de hoy todavía tiene adeptos… aunque no tantos como antes. Es normal si tenemos en cuenta que Matheson ya no está tras los guiones. Una ciencia ficción comedida, con pocos medios, con nada de efectos especiales, muchos decorados reutilizados (en Twilight Zone se reutilizaron decorados y escenarios de Forbidden Planet), y sobre todo unos guiones geniales que siempre tenían respuesta en unas interpretaciones magníficas y en unas composiciones de grandes musicos que o bien empezaban (Goldsmith), o bien se consagraban (Herrmann).

Cartel original de 'El Diablo sobre Ruedas'Muchas personas desconocen un hecho definitorio para entender la calidad de la primera película (aunque en EE.UU fue estrenada en TV) del director más poderoso de la actualidad, Steven Spielberg. The Duel, o El Diablo sobre ruedas, que es como se conoció en España, tenía guión de Matheson, y a su vez estaba basado en una historia de él mismo. Con una dirección medida, elaborada, que bebía directamente del genial Alfred Hitchcock, y también un guión que tenía al espectador sujeto a la butaca, el genial Matheson creó uno de los géneros que más se mimetizarían a posteriori, las geniales Road Movies con psicópatas de origen desconocido y aire diabólico (la divertida Jeepers Creepers de Victor Salva, por poner un ejemplo).

Carátula de la edición en DVDLa leyenda de la Casa Infernal nos regaló otra película basada en un libro de Matheson, pero su cometido no quedó allí, pues él mismo se encargó también de un magnífico guión. Una casa victoriana con espíritus surgidos de orgías demoniacas, donde un científico busca sentido racional a todo lo que está pasando, mientras dirige a un grupo de mediums y antiguos habitantes de la casa. Un final angustioso, con una maldad contenida que desborda irónicamente al espectador. Una película maltratada por la falta de publicidad y que está a la altura de la pieza clave del género de casas encantadas, la soberbia Al final de la Escalera de Peter Medak. De nuevo un cine de terror inteligente, con nada de artificios (sólo objetos que se mueven), y un final que literalmente pone los pelos de punta.

Crónicas Marcianas, el libroComo he dicho antes, Ray Bradbury fue un escritor con un gusto similar a Matheson por la ciencia-ficción. Pero es cierto que Bradbury tenía una forma de escribir más recargada, más gótica, llegando a pasajes de sus escritos donde el lector entraba en secciones incluso absurdas, pero para nada deficientes con el resto del relato. Crónicas Marcianas puede ser considerada la pieza clave de Bradbury, pero eso es cuestión de gustos, pues Farenheit 451 también podía serlo (película un tanto deficitaria dirigida por el director francés François Truffaut), o incluso el Hombre Ilustrado (película con banda sonora de Jerry Goldsmith), o tal vez Something Wicked This Way Comes (con esa adaptación cinematográfica donde Georges Deleure vio rechazado su score en favor de James Horner).
Crónicas Marcianas, la serieAsí, Matheson, ya familiarizado con adaptar al cine obras de otros autores literarios reconocidos, adaptó a televisión el libro de Bradbury Crónicas Marcianas, una serie de televisión que pudimos ver en España, y que tenia a Rock Hudson como protagonista. No fue una miniserie modélica, pero sí tenía una gran atmósfera, que era principalmente lo que hacía atractiva esta adaptación.

Somewhere in TimeSomewhere in Time contaba la historia de un hombre que literalmente se enamoraba de la mujer de un retrato que encuentra en un hotel. ¿Pero qué pasaría si pudiese conocer a esa mujer, sometiéndose a sí mismo a hipnosis? Una historia con múltiples conexiones a Más allá de los sueños, que también venía de una novela de Matheson. La película nos dejó una de las más bellas partituras de toda la historia, a cargo de John Barry. Además, esta historia influenció un corto dirigido por Clint Eastwood para la serie producida por Spielberg, Cuentos Asombrosos (Amazing Stories – 1985).
Amazing StoriesHablando de esta serie, Matheson trabajaría codo con codo de nuevo con Spielberg para dos episodios de este irregular serie: The Doll y One for the Books. Pero ahí no quedó su labor en esta nueva empresa, sino que también ejerció de asesor creativo, supongo que debido a su excepcional experiencia a una serie que pretendían homenajear, de nuevo… la sempiterna The Twilight Zone.

What Dreams May ComeMás allá de los Sueños, una película de Vincent Ward, el creador de la fantástica Navigator, también era una película basada en un libro de Matheson. La vida después de la muerte en esta cinta se asemejaba enormemente a la anterior Hecho en el Cielo, un drama fantástico con tintes de comedia, dirigida por Alan Rudolph, e interpretada por Timothy Hutton y Kelly McGillis. Así pues, el libro de Matheson podría haber servido de inspiración a ambas, aunque sólo está reconocida dicha adaptación en la película de Vincent Ward. Una imaginería preciosa, unos giros dramáticos insospechados, pero lastrados para muchos por un ritmo excesivamente lento y empalagoso, algo en lo que no estoy para nada de acuerdo. Más Allá de los Sueños es una de las películas más decididamente bellas de la historia del cine.

Y finalmente, Stir of Echoes, o como se llamó aquí, El Último Escalón. Una magnífica película de David Koepp, guionista de Parque Jurásico, Misión Imposible y Spiderman, que ya tuvo su bautismo de fuego con la perturbadora The Trigger Effect (El Efecto Dominó – 1996), otro estudio del ser humano, de la soledad y la violencia.

 

 

David Koepp Kevin Bacon en 'El Último Escalón'

Así, El Último Escalón tenia un genial guión, basado en la novela de Matheson y adaptado por Koepp, unos geniales actores, destacando muy por encima de todos al magnífico Kevin Bacon, una atmosférica banda sonora de James Newton Howard (colaborador de Koepp en sus dos películas), y una dirección de Koepp que se situaba entre lo mejor del cine de terror actual. Stir of Echoes representaba la vuelta a las casas encantadas de Matheson, pero con un sentido menos terrorífico que en La leyenda de la casa Infernal.

 

Soy Leyenda, o la historia de una obra maestra

Carátula de la edición en DVD de 'The Last Man on Earth'Y finalmente llegamos a su pieza cumbre, Soy Leyenda, una obra básica para entender la naturaleza humana, la soledad, la frustración y la perdida, así como la singularidad de las personas. Un individuo vive solo en una casa, acosado por seres extraños, vampiros que se alimentan de sangre y sólo salen de noche. Según lo que él sabe, es el último hombre vivo sobre la tierra, por eso de día sale de su casa y se dispone a entrar en los nidos de vampiros para ir acabando con ellos, en especial uno, un antiguo vecino que comanda las hordas de vampiros para intentar acabar con él.
Pero la soledad acosa a nuestro protagonista, Robert Neville, los recuerdos de su descendencia y de su mujer, moribunda por un virus ante el cual Neville es inmune, lo atormentan de tal manera que lo llevan a un insano alcoholismo, sólo para olvidar.
La novela es corta en volumen, y ciertamente se nos hace de esa manera, pues Matheson te absorbe en una lectura donde los pequeños giros van aplastando al lector en una sinfonía de tenebrismo, depresión y decadencia.
Matheson es tan listo que con sus pequeñas esperanzas hunde al lector cada párrafo más y más, llegando a un final que es lo mejor, un final ANTOLÓGICO.

Ilustración de portada de 'I am legend'Neville es un ser humano que vive destrozado por sus recuerdos, por su soledad, y por la imposibilidad de no encontrar a nadie. ¿Pero qué pasaría si encontrase a alguien? ¿Seguiría pensando que es una genial idea estar con él… o buscar encerrarse en su conveniente soledad, en la soledad humana tan dolorosa pero a la vez tan necesaria? ¿Son los vampiros metáforas que Matheson utiliza como mecanismo de critica de una sociedad que vive totalmente alienada, buscando la competitividad del más fuerte por encima de los más débiles? ¿La vida estándar donde los más talentosos y cualificados tienen que callar su pasión pues hablarían más alto que el todo, algo inadmisible dentro de una sociedad de mediocres? Respuestas que sólo se responderán con la debida lectura, o relectura de una de las piezas clave de la literatura del siglo XX.
Soy Leyenda tuvo varias adaptaciones cinematográficas, incluso una española. Pero vayamos por partes. La primera adaptación fue una coproducción Italo-americana, dirigida por Ubaldo Ragona, L´ Ultimo uomo della Terra, protagonizada por Vincent Price. Para muchos, esta primera película basada en la novela de Matheson es la mejor con diferencia. Rodada en Blanco y Negro, las características que la definen son la sutileza y contención que definen las mejores obras de Matheson. Aquí a Neville se le cambió el nombre por el de Robert Morgan, pero es la película que más se adapta al libro de Matheson, donde realmente hay vampiros y no mutantes albinos con el pelo a lo afro. Aquí no hay acción, y el 80% del metraje sitúa a Price en la soledad, sólo rota por los flashback. Una magnífica adaptación, con una banda sonora debida a Paul Sawtell y Bert Shefter.

 

 

Algunas escenas de esta primera versión
Algunas escenas de esta primera versión

A ésta le siguió el cortometraje español Soy Leyenda (1967), dirigido por Mario Gómez Martín, con una duración de 15 minutos. Sin duda una rareza que difícilmente podré comentar, sólo reseñar, a no ser que algún día tenga la suerte de poder verlo (veremos si se encuentra en la filmoteca nacional).

Omega ManCharlton 'No te pases un pelo conmigo' Heston, de Boris Sagal, llamada aquí El Ultimo hombre… vivo supuso un refrito setentero de la novela de Matheson, con más acción, y con la eliminación drástica de cualquier elemento de soledad, lucha interna, o sutilidad. Omega man tenia entre sus virtudes a un genial Charlton Heston (para mí el mejor actor para hacer de Neville), y una magnífica dirección, así como ambientación. Pero el guión destroza por completo la novela de Matheson, siendo los vampiros mutados, con un aire setentero (esas pelucas afroalbinas… ¡¡Dioss!!), convirtiendo a Neville en una especie de Rambo motorizado, y descubriendo la existencia de unos niños que viven en una comunidad apartada, o sea, invención exclusiva para la película. La acción es lo predominante, y en todo momentos encontramos ciertos aires a una gran obra maestra de la ciencia ficcion: The Omega ManEl Planeta de los Simios, también protagonizada por Heston, algo que dejaba bien claro que lo que se buscaba era conseguir una película de este tipo, más que buscar una fiel adaptación. Pero definitivamente sus responsables no obtuvieron ni lo uno (El planeta de los Simios está a años luz de esta cinta) ni lo otro (como película de ciencia-ficción es curiosa, como adaptación es nefasta).
Hace muy poco Ridley Scott pretendió llevar a buen puerto una adaptación cinematográfica, junto a Arnold Schwarzenegger como protagonista, pero el proyecto se canceló por exceso de presupuesto en la producción. Y yo digo, ¿exceso de presupuesto? Sinceramente, no esperaba que Scott hiciese una adaptación fiel del libro de Matheson, pues la escasez de medios, basado en un monólogo casi toda la narración es la mayor característica del libro. Supongo que de nuevo nos encontraríamos ante una superproducción americana, donde los efectos especiales y la acción lastrarían las geniales ideas de Matheson.

En definitiva, una gran obra, una obra capital de la literatura contemporánea, en especial de la fantástica, gracias a un genio… EL ÚLTIMO GENIO VIVO SOBRE LA TIERRA.

 

28 Days Later (28 Días Después)

PósterCon las premisas básicas del genero de terror más italiano, en manos por el americano George Romero, 28 días después enmascara su verdadera esencia, que no es otra que el libro capital de uno de los genios del siglo XX, el genial Richard Matheson.
El director, Danny BoyleSoy Leyenda es la mayor influencia de una cinta que, aparte, tiene otras fuentes como principales precedentes. Recordemos el paseo de un inquilino del hospital que sale súbitamente de su estado de coma encontrándose totalmente solo. Esa soledad y ese acoso por una nueva raza surgida de un virus, es la mayor influencia de Soy Leyenda. Pero ahí no queda la cosa. La segunda mitad de la película conecta con la novela, a partir de una oligarquía desarrollada por el último reducto del ejército ingles, un nuevo orden que conecta con otro nuevo orden bastante más «genético» en el ultimo tramo de Soy Leyenda… personas que en este mundo donde las normas desaparecen, viven dentro de un código ético inexistente.
Así, el protagonista de 28 días después es único en su especie, no en el sentido genético o físico, sino en el mental, pues es capaz de comportarse como los infectados del virus «ira» pero sin tenerlo en la sangre, mira tú por donde, una de las características más humanas. Una especie de metáfora de Boyle, el director de la cinta, sobre la violencia interior del ser humano: primigenia, salvaje e impasible.
Jim en estado de 'ira'28 días después podría tener varios puntos en común con Resident Evil, y de hecho los tiene… Sobre todo en su forma de rodar, aséptica, limpia, fría a veces… Aunque Boyle se vuelve mucho más sucio y alocado en las magníficas escenas de acción, con esa cámara fugaz y temblorosa, que capta leves instantáneas de los rostros inyectados en sangre, planos que conectan con Demons, lo mejor de Lamberto Bava, escenas deudoras del mejor terror gótico italiano.
No creo que Romero sea el referente a Boyle ni de lejos. Es más, el propio Romero confesó la influencia de Soy Leyenda para su mítica La noche de los Muertos vivientes… Así que me parece una idea muy correcta pensar que Boyle ha pasado del intermediario para ir directamente al inventor de la idea.
Así, 28 días después se convierte en una fusión perfecta entre Soy Leyenda+Terror gótico Italiano+Cine de Boyle.

El protagonista, en una tensa situaciónLa utilización de una cámara digital puede entusiasmar mas o menos, según el espectador. Lo que está claro es que este formato es un arma de doble filo, pues hace que el espectador esté mucho más próximo a todo lo que está pasando en la pantalla, por esa sensación de proximidad al aumentar la definición que deja la cámara digital. Este formato es ideal para los ataques de los infectados. Pero en las escenas calmadas se nota que tal vez no sea el indicado. A veces los colores se saturan con la excesiva utilización de filtros en el montaje digital, y también se consigue una textura mate que no llega a obtener grano, pero si tiende a desenfocar determinadas partes de la imagen.
Eso en 28 días después puede no llegar a gustar… y es cierto que determinados planos deberían de haberse regrabado… pero también es cierto de que para este tipo de película, esa sensación de estar en un sueño, conseguida por la acumulación de filtros, es la ideal.

Holaaaa...En cuanto al universo musical de Boyle para esta epopeya sobre zombies veloces, éste ha preferido utilizarla para momentos puntuales… en ningún momento para escenas de ataques, sino para otros más visualmente evocadores, como el tema Rage de John Murphy, cuando Jim recorre las calles despobladas de la ciudad, y sólo el antirrobo de un coche rompe el aterrador silencio de una ciudad desolada, o el tema de Brian Eno, An Ending (Acent), cuando los protagonistas encuentran el único momento de respiro de toda la película en un santuario abandonado (irónica la presencia de un santuario, lugar donde los valientes iban a descansar y curar sus almas), donde contemplan una manada de caballos cabalgando por un gran prado verdoso, una imagen bella que está perfectamente acompañada por el atmosférico e incluso celestial tema de Eno. No olvidemos momentos de un carácter plenamente onírico, gracias a una voz femenina, que amplían aún más el horizonte de la percepción pesadillesca, son requiems o misas que tienen especial interes en un momento muy duro al principio de la cinta, cuando Jim descubre algo en una foto. John Murphy confecciona una partitura cuyo mayor signo de reconocimiento es el de un sonido atípico, frío, a veces terrorífico, con proliferación de guitarras, un compositor ingles que ya esta acostumbrado a ver su score absorbido por múltiples canciones como fue el caso de Snatch, o Lock and Stock.

Unos pocos supervivientes en un mundo inhóspitoUna edición discográfica que recomiendo a aquel que disfrutó de la película, pues volverá a recordar cada escena y cada momento, pues aunque John Murphy no da mucha homogeniedad al universo musical, y tampoco ayudan algunos temas de otros compositores, éstos están perfectamente elegidos para cada una de las escenas. Un score tan atípico que tal vez no convenza a los seguidores de lo melódico, o de lo orquestal. Una apuesta musical propia de la filmografía de Boyle, para una película que salvo por su penoso final, podría considerarse una de las mejores películas fantásticas que se han realizado en mucho, pero que mucho tiempo. Por lo menos, nos quedarán los finales alternativos.