City of Ember

Compositor: Lockington, Andrew
Año: 2008
Distribuidora: Bullettproof Records
Duración: 71:44

Walden Media, productora especializada en cine para toda la familia ataca de nuevo. La productora, ligada en sus inicios a Walt Disney Pictures, ha ido aliándose en tiempos recientes con otros estudios de Hollywood, como New Line Cinema o ahora Twentieth Century Fox , para esta City Of Ember, cuyo sinfónico score firma, al igual que el de la producción de la New Line , Journey To The Center Of The Earth, el prometedor Andrew Lockington.
Historia  de una ciudad decadente.

Está claro que Gil Kenan, director de aquella maravilla que se estrenó hace un par de años llamada Monster House, ama los ochenta. Igual que la producción animada de Columbia, que mereció mejor suerte en la taquilla, esta City Of Ember nos presenta una aventura típicamente ochentera, protagonizada por unos chavales que se embarcarán en una aventura que los adultos no se atreven ni a considerar, demostrando que el tesón y el poder de la imaginación pueden cambiar la vida tal como la conocemos.

La novela de Jeanne Duprau ha sido adaptada por la gran  Caroline Thompson, autora de libretos de obras maestras como Edward Scissorhands o The Nightmare Before Christmas, consiguiendo una vez más una guión conciso (quizás demasiado, como ya ocurría con otra de sus obras magnas, Corpse Bride), denso y que no deja ni un momento para el respiro, resultando un delicioso filme de escasos 90 minutos .

Se cuenta la historia de la ciudad subterránea de Ember, en la que generación tras generación ha vivido una comunidad de humanos, bajo la protección de unas enormes lámparas y bajo el mandato de un alcalde hedonista (Bill Murray en otra de sus composiciones hierático-cómicas de un personaje tan desagradable como entrañable) que ha adoptado una distribución de tareas y trabajos similar a la de un hormiguero. Cuando el enorme generador que alimenta la luz de las mencionadas lámparas empiece a fallar, el frágil equilibrio de la ciudad se tambaleará. Solamente dos jóvenes habitantes de la misma, Lina Mayfleet, encarnada por Saoirse Ronan, nominada al Oscar por Atonement, y Doon Harrow (el inglés Harry Treadway) serán capaces de enfrentarse al poder establecido de la decadente urbe para liberar a la gente que vive en la misma del yugo de la oscuridad de una vez por todas. Para ello contarán con la ayuda del padre de Doon, crítico con la autoridad en su juventud, pero domesticado por el sistema (Tim Robbins, sin duda una elección acertada para el papel) y el gruñón encargado del generador  que se encuentra más allá del sistema de túneles de ciudad (Martin Landau, en otra de sus deliciosas interpretaciones).

Obviamente, Gil Kenan no es Tim Burton (ni lo pretende) , y la película queda como un agradable entretenimiento para toda la familia, una fábula con mensaje, que por otra parte, como antes indicaba,  se degusta en un santiamén, gracias sobre todo a su imaginativo y económico guión y su eficaz puesta en escena (destacando un  fabuloso diseño de producción y decorados).

Escape hacia la luz: la música de City Of Ember

Desconocemos si impulsado por los excelentes resultados de su anterior colaboración con Walden Media, o por elección del director (que, recordemos, en su obra anterior Monster House, había colaborado con Douglas Pipes, que creó una magnífica música para una película no menos magnífica), el canadiense Andrew Lockington se ha hecho cargo de dotar de vida el universo sonoro de esta City OF Ember.

La música aplicada por el compositor, igual que en sus composiciones anteriores más conocidas Skinwalkers y Journey To The Center Of The Earth, debe calificarse de sinfónica, orquestal, con alguna intervención, muy bien integrada en el conjunto, de música electrónica.  También vuelve a colaborar con el gran Nicholas Dodd, una garantía en la orquestación, que como es habitual también se encarga de la dirección de orquesta.

El score se centra en dos temas principales: el que se refiere a la Ciudad, y sobre todo a su estado de semi-caos actual, y otro que se aplica a la Protagonista Lina. El primero de ellos, que podemos escuchar hacia el final del primer corte “City of Ember. Main Titles”, es una marcha, entre épica y oscura, dominada por las trompas, que incorpora un fondo de sintetizador  que se asemeja a un reloj, a modo de cuenta atrás hacia la destrucción de la ciudad. El tema se va repitiendo a lo largo del score en secciones del track “Tunnels” o en otros como “Mole”, sin que se haga una uso abusivo del mismo, ya que se va complementando con el segundo de los motivos antes anunciados.

Efectivamente el tema de Lina, la joven protagonista de nuestra historia, es como la otra cara de la moneda, este sí, decididamente épico,  positivo y optimista, reflejando el carácter del personaje. Este motivo, posiblemente el mejor tema de la partitura, lo escuchamos por vez primera en el segundo corte de la edición discográfica que toma justamente el nombre del personaje central “Lina Mayfleet”, y lo iremos encontrando durante toda la composición, bajo la guisa de diversas variaciones desde el alegre inicio de “Job Exchange” hasta las notas urgentes y rápidas de “Fugitives”. El tema de Lina se irá imponiendo al más fatalista de la Ciudad, hasta culminar en la parte final de la composición, que es la que mejores momentos nos reserva, sobre todo en los cortes “Escape To Sunrise” y “One Last Message”, en los que toman protagonismo unos coros, casi celestiales, que ilustran el final de la película, que no revelaré, aunque no es el colmo de la originalidad (sí, efectivamente: es lo que estáis pensando todos/as).

El dominio de la orquesta de Lockington se materializa, no obstante, durante todo el score, echando mano además de otros recursos como el coro y la música electrónica. En “Water Wheel” la acción se subraya con voces humanas en lo que casi son cánticos, y en el extenso“Tunnels”, se hace uso de unos siniestros coros acompañados de efectos electrónicos, a modo de cavernosos ecos , que ayudan a crear el clima de tensión que requiere la escena.

El personaje de Bill Murray, el alcalde la ciudad, también tiene un tema propio, para nada tan evidente como el de la protagonista Lina, sino más ambiguo, sinuoso y malicioso, a menudo mezclado con el tema decadente de la ciudad. En fin, encontramos también otros motivos secundarios, ligados a secuencias de acción, por lo general dinámicos y de carácter sinfónico, por ejemplo en cortes como los espectaculares“Clockworks” y “Lori’s Bike”.

En cuanto a la edición discográfica, a cargo de Bulletproof Records, es extensa, incluyendo prácticamente la totalidad de la música de la película, aunque el libreto no incluye demasiada información sobre la película o la música, más allá de los créditos relativos a la composición,  los obligados “Thank You”, y cuatro instantáneas de los decorados del filme.

Concluyendo, para quien firma esta reseña, se trata de un nuevo triunfo del ascendente Andrew Lockington, que consigue una composición, posiblemente no tan robusta como Journey To The Center Of The Earth, pero temáticamente más rica, definida y bien estructurada. Muy recomendable. 

Lo mejor:  El sinfonismo de la propuesta y la estructura temática de la obra, además de la extensa duración del CD editado.

Lo peor: Nada en cuanto a la composición, en todo caso es discutible la mezcla de la música en la edición discográfica, que en los momentos más tranquilos pierde fuerza y fuelle, siendo casi inaudible en algunos pasajes.

El momento: Los dos temas finales, fabulosos.

David Saiz