Compositor: Doyle, Patrick Año: 2008 Distribuidora: Varèse Sarabande Duración: 61:19
Tracklist:
Eva (3:07)
Igor (4:47)
Scamper & Brain (2:30)
Schadenfreude (1:39)
Hi Heidi (1:05)
Except the King (1:41)
Evil Bone (3:30)
Blind Orphans (1:24)
Brain Wash (1:29)
Oven Bun (3:05)
Acting Me Me Me (1:58)
Cliff Chase (2:42)
Plucky Eva (3:15)
Opening Night Presents (3:45)
Hot Tub Rub (3:15)
Falling For Director (2:37)
Evil Science Fair (3:08)
Secret Passage (1:36)
Through the Clouds (2:12)
Let's Get Evil (1:17)
Evil Annie (6:52)
Malaria Community Theatre (2:34)
Wistful Thinking (1:51)
Estrenada en septiembre de 2008 en Estados Unidos, esta peculiar película de animación dirigida por Anthony Leondis va a tardar nueve meses en proyectarse en las salas de cine españolas, nueve meses largos como un parto que pueden haber provocado la pérdida de interés entre muchos de los que hemos escuchado la música desde que se editó el CD el pasado otoño.
La principal baza de esta producción es su guionista, Chris McKenna, el creador de American Dad!, que ha trasladado su humor con mala leche a esta historia de jorobados e inventores de máquinas maléficas ideadas para destruir el mundo. Sin embargo, el humor ácido y cafre –que lo hay- no es suficiente como para concluir que Igor sea una buena película, sino un producto divertido por momentos y original a ratos, pero que no escapa al mensaje moralizante habitual. Hay que reconocer que tiene sus puntos, entre ellos Scamper, el conejo inmortal que trata de suicidarse a toda costa, o el lavado de cerebro fallido –a lo “naranja mecánica”- que transforma a la “criatura” Eva en una aspirante a actriz tras haber visto por error una conferencia sobre las virtudes del Actor’s Studio.
Pero vayamos a la música. Patrick Doyle lleva últimamente una racha de producciones dirigidas a público infantil-juvenil que, a juicio de algunos, ha conducido a cierto encasillamiento sonoro. Eragon, La última legión y La isla de Nim comparten en ocasiones sonoridades parecidas, en especial en los momentos de acción, así como esa pomposidad tan característica del compositor escocés.
En Igor la cosa ha cambiado. No al cien por cien, puesto que también hay temas que no se desmarcan de su estilo reciente, pero existe una mayor variedad, más amplitud de recursos, mucho más “humor musical” y fragmentos arrolladores e intimistas que merecen tener este score en consideración.
Sin embargo, el montaje final de la película ha jugado alguna que otra mala pasada a la música. Y eso lo vemos nada más comenzar. Durante toda la parte de la introducción, mientras el protagonista explica quién es, dónde vive y para quién trabaja, oímos la canción “Pennies from Heaven”, con voz de Louis Prima, intérprete al que escuchamos más adelante con otro par de temas. La elección de esta canción para todo el prólogo significa haber prescindido de la mayor parte del tema “Igor”, escrito por Doyle para esa escena, y del que sólo se ha incluido en la película algo menos del minuto final –a partir del 3:50-. Lo triste es que “Igor” es uno de los mejores tracks de esta banda sonora y uno de los más creativos del compositor en estos últimos tiempos. En sus casi 5 minutos presenta la atmósfera de la historia, con un arranque bastante elfmaniano de voces y sonidos fantasmagóricos de mansión encantada. Con las maderas presenta el tema de Igor
, que arropa de percusiones y metales para hacerlo crecer de forma progresiva. La parte final del corte, la que se incluye en la película, parece sonar a autoparodia, pues la instrumentación evoca en cierto modo al tema “The Creation”, de Frankenstein, con la imagen de Igor activando la palanca que pone en marcha la nueva invención de su amo
.
Ese sonido de la “creación” lo encontramos más adelante en “Evil Bone”, otro de los highlights de esta banda sonora, cuando Igor da vida a Eva. Comienza con las cuerdas, sigue con el tema de Igor, con aire siniestro al principio y más grandilocuente después, con máxima potencia de coros y percusiones en su tramo más vibrante. El parentesco con Frankenstein queda patente
.
Otro de los puntos fuertes de este trabajo es el tema sentimental –hasta cierto punto romántico, dado que establece la relación entre Igor y su criatura Eva-. Lo escuchamos por primera vez en “Opening Night Presents” y la melodía se nos queda con facilidad. Más tarde suena en “Falling for Director” y en la conclusión del film, “Malaria Community Theater”
.
Las piezas cómicas –con abundante mickeymousing- ocupan gran parte del CD. Algunas destacan por su originalidad, mientras que otras pueden llegar a cansar. Sin embargo, son buena prueba de que Doyle se ha divertido escribiendo esta banda sonora. El requisito principal a la hora de aceptar un encargo, tal como él mismo ha manifestado en más de una ocasión, es que le resulte divertido. “Scamper & Brain”, “Schadenfreude”, “Hi Heidi”, “Except the King”, “Blind Orphans”, “Brain Wash”, “Oven Bun”, “Acting Me Me Me”, “Plucky Eva” o “Hot Tub Rub” son básicamente temas cómicos, todos ellos distintos y resueltos con mayor o menor fortuna.
Asimismo, Doyle crea algunos temas de acción interesantes, como “Secret Passage” o “Let’s Get Evil”, pero destaca por encima de ellos el impetuoso “Cliff Chase”, que acompaña la persecución de carruajes y que está basado en el propio tema de Igor .
Todo el último tramo del film hace referencia a la feria de inventos maléficos, que cuenta con una potente fanfarria de metales y coros que remite, en cierto modo, al inicio de aquel tema de Harry Potter y el cáliz de fuego titulado “Golden Egg”. Incluso la imagen aérea del recinto de la feria recuerda el anfiteatro en el que Harry Potter se enfrentaba al dragón. Esa fanfarria, tan propia de Doyle, la encontramos al principio de “Evil Science Fair”, así como en algún momento de “Through the Clouds” y, más pomposa si cabe, en “Let’s Get Evil” .
También vale la pena destacar el momento en que Igor comprueba en lo alto de la torre del castillo que el tiempo en el reino de Malaria es siempre tormentoso debido a un montaje del rey Malberto construido para atraer a las nubes. La aparición del cielo azul por encima de los negros nubarrones se acompaña de mágicos coros femeninos en un brillante fragmento del corte “Through the Clouds”
.
El tema creado para el clímax de la película es el más largo del disco, “Evil Annie”, un tour de force en el que Eva destroza al resto de invenciones maléficas mientras entona la famosa canción “Tomorrow”, del musical Annie. El disco incluye únicamente el acompañamiento instrumental, en el que Doyle va insertando breves fragmentos de la melodía con pretendida ampulosidad
. El corte transcurre por numerosos cambios de ritmo que se adaptan a la acción y, hacia el minuto 5, se vuelve suave cuando Igor logra convencer a Eva de su bondad, instante en que brilla de nuevo la luz del sol sobre Malaria y Doyle remata la escena con unos últimos coros triunfalistas.
De regalo, el CD incluye dos piezas interpretadas por el propio compositor al piano, algo que ya hizo en Secondhand Lions. Son el primer y último corte del disco, “Eva” y “Wistful Thinking”, respectivamente. El primero es el tema de Eva, un motivo que en la película aparece en contadas ocasiones y aún menos en el CD ; y el último, “Wistful Thinking”, es la versión en piano del tema romántico .
Si bien casi todos estamos de acuerdo en que Igor no será recordado como uno de los mejores trabajos del compositor escocés, sí es cierto que se trata de uno de los más interesantes, ricos e imaginativos de su obra reciente.
Lo mejor: Doyle demuestra que se ha divertido haciendo este trabajo y nos deja unos cuantos temas realmente memorables, parodiándose a sí mismo y regalándonos un precioso tema romántico.
Lo peor: La exclusión de algunas piezas del disco (“Igor”), que en la película han sido sustituidas por canciones de Louis Prima, así como un exceso de piezas cómicas de distinto pelaje que da lugar a un conjunto muy heterogéneo..
El momento: Un par, “Evil Bone” y “Opening Night Presents”.