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Miracle

Miracle


Compositor : Isham, Mark
Año : 2004
Distribuidora : Hollywood Records
Duración : 56:41

Bueno
Tracklist:
  1. The Team - 7:16
  2. Training - 17:28
  3. The Games - 4:42
  4. The Miracle - 15:35
  5. (Don't Fear) The Reaper. Blue Öyster Cult - 5:09
  6. Must of Got Lost. J. Geils Band - 2:58
  7. Thunder Island. Jay Ferguson - 3:31

Una historia de Disney sobre cómo el equipo estadounidense de hockey sobre hielo ganó contra todo pronóstico la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de invierno en 1980. Así podemos describir Miracle en tres líneas.
A priori podría parecer que es una película más de ésas que uno ve entre cabezada y cabezada el domingo por la tarde en la televisión. Y tal vez lo sea dentro de unos años. Pero de momento ha sorprendido su buena aceptación por parte de crítica y público, llegando a superar los 60 millones de dólares en la taquilla americana.

Kurt RusellEn la historia del cine hay cientos de películas como ésta, relatos sobre cómo alcanzar el éxito deportivo a base de esfuerzo y determinación, aun cuando todo parece estar en contra. Los hay de béisbol (El mejor), boxeo (Rocky), caballos (Seabiscuit), fútbol americano (Rudy)...
Sin embargo, muchos coinciden en que el éxito de Miracle, dirigida por Gavin O'Connor, se debe en gran parte a Kurt Russell, que encarna de manera magistral al entrenador Herb Brooks, a quien se le encargó reunir a un equipo de jugadores para representar a Estados Unidos en aquellas Olimpiadas de invierno, tarea nada agradecida que acabó, como reza el título de la cinta, en milagro, al ganar al "invencible" equipo soviético en la final, tras eliminar por el camino a otras selecciones consideradas superiores a la estadounidense.
La clave del éxito tal vez radica en que el guión trata más de la figura del entrenador que del equipo o de las sucesivas victorias. Y además rinde homenaje al auténtico Herb Brooks, que falleció en un accidente de automóvil justo al acabar de rodarse el film.

La partitura de Mark Isham, completamente sinfónica y alejada del jazz que tanto caracteriza muchos de sus trabajos para el cine, es ciertamente interesante, y en especial destaca por una rica orquestación a cargo de Frank Macchia y Ken Kugler, éste último también director de la orquesta, la Hollywood Studio Symphony.
El CD nos presenta el score de Isham en sólo cuatro cortes, aunque cada uno de ellos dividido en varios temas, separados por breves pausas, de modo que en realidad tenemos una buena docena de pistas que hacen de esta obra un trabajo variado con todos los matices propios de una película sobre el éxito deportivo: adagios dramáticos, fragmentos que subrayan la tensión y temas triunfales.

"The Team" inicia esta banda sonora de una manera suave, con el tema principal construido en sucesiones de cinco notas. Es un tema de carácter dramático que va creciendo, apoyado por redobles de la caja y en ocasiones por la trompeta, transmitiendo una sensación de tensión.
La segunda parte del corte también se construye sobre un tempo lento que va in crescendo y acelerándose para terminar con un rítmico juego de cuerdas que recuperarán finalmente el tema principal con las maderas.

"Training" es un corte largo de más de 17 minutos, dividido asimismo en varios fragmentos. No obstante, la idea dinámica que puede sugerir su título ("Entrenamiento") la tenemos únicamente en su principio y su final. En casi toda su extensa parte central predominan los adagios de cuerdas, con una sensación de drama e indefinición. El principio del corte evoca al gran Bernard Herrmann, con juegos de cuerdas vigorosos, acompañados con los vientos de madera y después con los metales y la percusión, dejando patente el magnífico trabajo realizado por los orquestadores. El último minuto y medio del corte recupera el ritmo vibrante y dinámico con un buen tema para trompeta cuyo carácter optimista contrasta con los diez largos minutos precedentes.

"The Games" también está marcado en su primera mitad por el tono suave, dramático y tenso, aunque de intensidad creciente, y con la trompeta como instrumento protagonista. La segunda mitad es bastante más animada, recuperando el tema principal de cinco notas con redobles de caja.
Inicio suave y lento de cuerdas, también triste y dramático cuando entra la trompeta haciendo un solo. La intensidad va creciendo. La segunda parte es bastante más animada. Recupera el tema principal intercalado en fragmentos de ritmo sincopado que ponen de manifiesto de nuevo una rica orquestación.

"The Miracle", cuarto y último tema del score, es otro largo corte que supera los 15 minutos. Su inicio también es intrigante. Hacia el minuto 2 escuchamos el clarinete y el oboe jugando sobre los redobles de la caja hasta que entran las cuerdas, aumentando la intensidad para pasar de un aire dramático a otro más triunfalista. El tono de la música va variando intermitentemente de lo triste a lo intenso, creando el mayor momento de suspense con la percusión y los metales hacia los 7 minutos de la pista, dejando incluso algún momento dedicado únicamente a la percusión. Todo eso desemboca finalmente, hacia los 11,40 minutos, en el motivo triunfal, de hecho esperado en una película de estas características, un himno de victoria desarrollado con cuerdas y vientos que acaba suavemente recuperando el tema principal, menos dramático que en sus presentaciones previas.

El CD se completa con tres canciones de los años setenta, tres buenos temas de Blue Oyster Cult, la J. Geils Band y Joe Ferguson, en especial los dos primeros, que tienen un lugar reconocido en la historia del pop-rock.

El score de Miracle no llega a la altura de bandas sonoras sobre films de este tipo ya míticas para el aficionado, léase Rudy de Jerry Goldsmith o The Natural de Randy Newman. Sin embargo, es justo reconocer que Isham ha hecho un trabajo muy meritorio que cumple adecuadamente con lo que exige la película sin adquirir un protagonismo excesivo. El director de la cinta, Gavin O'Connor, comenta en el CD precisamente este hecho, destacando que es un score que sirve perfectamente al film, sin que Isham haya creado un sonido que identifique la obra como suya propia.

Lo mejor: Su adecuación como banda sonora a la película y sus trabajadas orquestaciones.

Lo peor: Algunos tramos de la partitura bastante anodinos.

El momento: El minuto y medio final de "Training" y el tema triunfal desarrollado en la última parte de "The Miracle".

Óscar Giménez

 
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