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Trevor Jones, el director de batuta de ambientes oscuros y cerrados, aparece para sorprender a desertores de su universo, con una pieza magistral que denota su carácter ecléctico. Nothing Hill es una de las mejores composiciones de Jones, alejada totalmente de su estilo contundente y precipitado (casi en todas las piezas de acción) o de sus temas grandilocuentes (casi todos los que ha realizado para TV), más próxima a trabajos propios de un músico venido del rock como es Mark Knopfler, tales como Call o Local Hero (sobre todo esta última). Es más, con la abundante utilización de la guitarra acústica en los momentos más intensos, por la mente nunca se nos aparece la figura de Jones, sino el guitarrista de los desaparecidos Dire Straits. De todas formas el trabajo de orquesta también hay que tenerlo en cuenta, y es ahí donde aparece el oficio de Jones, acompañando en todo momento a la guitarra o al piano (y a veces es suplida por los teclados y el saxofón).
El score no fue editado en su día, y sí aparecieron dos temas en la edición discográfica oficial que claramente eran lo mejor del disco y que nos dejaba con ganas de más. Luego apareció un promo de esos que enmascaran la palabra (bastante desagradable) "pirata", con unos 36 minutos de score donde cada tema es un mundo, un mundo dulce y seductor a los oídos. Jones se alejó así de un encasillamiento que él mismo se había buscado con trabajos un tanto cerrados al circulo Hollywoodiense, siendo esta cinta su destierro de ese espacio opresivo, más aún cuando Nothing Hill tiene el sabor británico por todos lados, algo que significa una salida a otro tipo de composición totalmente vetada para el compositor.
De la edición "promo" destacamos el "Track 2" (me encantan los nombres de los tracks en las ediciones "pseudopromo"), que es el "Main Title", y su último tema, "Track 18", el más alejado del conjunto, muy rockero, con la aparición de batería y una guitarra eléctrica. Sólo tenemos una canción, la de Elvis Costello, "She", que también aparecía en la edición oficial (pero en ésta tenia una duración mayor) que tiene lugar en los títulos de presentación de la película (¡¡Pasen y vean a Julia Roberts!!), y que se integra perfectamente. De todas formas, si no nos agrada demasiado, empezaremos por el segundo corte, sin ningún tipo de quebradero de cabeza.
Lo Mejor: Trevor demuestra que no es un compositor centrado en un mismo estilo que explota hasta la saciedad. Nothing Hill es una puerta abierta para un nuevo universo musical del compositor.
Lo Peor: Que haya que recurrir a ediciones bastante difíciles de encontrar para reconocer el magnifico trabajo de Jones.
El Momento: Track 2
DDBSpawn
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