Tracklist:
- Ferdinand (02:54)
From "Pierrot Le Fou"
- Ouverture et Camille (05:15)
From "Le Mépris"
- Vacances (02:25)
From "Jules & Jim"
- Chantal Martineau / Valse Tordue (02:35)
From "Garde à Vue" / "Roi de Coeur"
- La Vérité ou la Mort (02:27)
From "Un Héros Très Discret"
- Au Royal Lepic (01:54)
From "Un Héros Très Discret"
- Pierre et Nicole (02:12)
From "La Peau Douce"
- Peur sur la Ville (03:51)
From "Peur Sur La Ville"
- De Paris à Baden-Baden (02:13)
From "Un Héros Très Discret"
- Medley (05:23)
From "Sur Mes Lèvres"
- Medley I (03:23)
From "Le Dernier Tango à Paris"
- Medley II (03:04)
From "Le Dernier Tango à Paris"
- Medley III (02:31)
From "Le Dernier Tango à Paris"
- Medley IV (04:07)
From "Le Dernier Tango à Paris"
- Adela's Theme (02:31)
From "La Route Des Indes"
- Ballade Dérisoire et Largo (02:52)
From "L'Important C'Est D'Aimer"
- Trois Petites Notes de Musique (01:48)
From "Une Aussi Longue Absence"
- Regarde les Hommes Tomber (02:48)
From "Regarde Les Hommes Tomber"
- Les Femmes d'Albert Dehousse (03:05)
From "Un Héros Très Discret"
- Il faut payer maintenant (02:23)
From "Regarde Les Hommes Tomber"
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A finales de la década de los 50, una nueva corriente cinematográfica liderada por un puñado de directores franceses con singulares inquietudes, la Nouvelle Vague (la Nueva Ola), acaparó la atención de medio mundo. En verdad eran jóvenes guionistas que se disponían a dar el salto a la dirección sin cerrarse a los convencionalismos que poblaban el cine francés, siendo su libertad de expresión, así como su libertad técnica a la hora de contar sus historias, las armas con las que buscaban ilustrar este nuevo movimiento.
El grupo estuvo formado por autores que a día de hoy son un referente claro en el panorama cinematográfico europeo: Jean Pierre Melville, Alain Resnais, François Truffaut, Jean-Luc Godard, Claude Chabrol, Jacques Rivette, o Eric Rohmer.
De entre ellos destacó como pieza ejempificadora de lo que fue la Nouvelle Vague, la excelente y costumbrista, Los Cuatrocientos Golpes, la primera película de François Truffaut que en cierta manera influenciaría posteriormente al Amarcord de Federico Fellini, a pesar de su estilo menos optimista.
Uno de los elementos que mas a influenciado al cine francés después de que esta nueva ola golpease con estrepito su cine, fue la forma de enfocar la música de sus películas y como con estos nuevos planteamientos, parecieron surgir músicos que, hasta el día de hoy, han seguido dotando a la música de este país de un sello especial.
Los Cuatrocientos Golpes se vio beneficiada de una corta pero sensacional partitura a cargo de Jean Constantin, estableciendo un estilo de fuerte presencia de las cuerdas y melodía retentiva que fue la marca personal de compositores franceses como el añorado George Delerue, uno de los compositores más capaces de la historia de la música de cine.
Han pasado los años y el cine francés aunque ya no observa deslumbrado la llegada de nuevos autores iniciadores de un nuevo movimiento cinematográfico, sí que es consciente de su magnífica buena forma en lo referente a la música de cine. Y es que empezamos a nombrar compositores franceses como Phillip Rombi, Bruno Coulais, Cyril Morin, Pierre Adenot o Alexandre Desplat, así como los más veteranos aun en activo, Bruno Coulais, Armand Amar, Gabriel Yared, Phillipe Sarde o Frederic Talgorn por poner algún ejemplo, y no hay duda de que la música de cine francesa ha llegado a respetar sus raíces pero sin caer en la autocomplacencia.
En ese ejercicio doble, de rendir tributo a esta recordada nueva ola pero con un estilo moderno que sea fiel a las nuevas generaciones de músicos, nació el Traffic Quintet, quinteto dirigido musicalmente por uno de los más talentosos e internacionales compositores franceses, Alexandre Desplat.
Este quinteto de dotados interpretes, realizan no ya un recorrido exclusivo por las músicas de la Nouvelle Vague, sino tan bien, por esa música de cine posterior que recogió sus frutos. Es por eso que el título del disco que nos ocupa hace relación a ese creativo trayecto Nouvelles Vagues: De Godard a Audiard.
El quinteto está liderado por Dominique Lemonnier, pareja de Desplat, excelente violinista que ha participado como instrumentista en más de una partitura para cine. Aunque Desplat es el director artístico y el que realiza las adaptaciones de las obras versionadas, Dominique es la verdadera iniciadora de este quinteto. El mismo se completa con Anne Villette, Estelle Villotte, Raphaël Perraud y Phillippe Noharet.
Se nota un especial cariño por el trabajo de George Delerue algo que yo personalmente no les echare en cara. Y se nota por que de las 16 obras readaptas y versionadas, 7 son de Delerue. También, cómo no, Desplat está muy presente, con 6 de sus obras. Luego tendríamos composiciones de Antoine Duhamel, Ennio Morricone (la peor del disco para mi gusto, Peur Sur la Ville película dirigida en el 75 por Heri Verneuil), Gato Barbieri o Maurice Jarre.
Destacan especialmente la melancólica adaptación de Pierrot le Fou de Antonie Duhamel, una película de Jean- Luc Godard del 65, los excelentes arreglos de esa obra maestra de Delerue que es Le Mépris, película también de Godard del 63, el aire minimalista de Un héros trés discret, pieza de Desplat que aparece en tres actos en el CD, la tristeza de otra pieza de Delerue, La Peau Douce, una película de Truffaut del 62, la extraordinaria versión de Le Dernier Tango à Paris (El Último Tango en Paris) de Gato Berbieri, el aire desenfadado otorgado a la obra de Maurice Jarre, La Route des Indes (Pasaje a la India) o el clásico arreglo de otra pieza de Desplat, Regarde les Hommes Tomber, película de Jacques Audiard del 94 con la que se cierra el disco.
Destacar también la magnífica edición del sello francés Naïve, que últimamente nos ha entregado recopilatorios indispensables de Bruno Coulais, Armand Amar y Gabriel Yared y que desde aquí seguiremos muy de cerca con sus correspondientes reseñas.
Nouvelles Vagues: De Godard a Audiard, es algo más que un disco de versiones. No es que lo diga yo. Simplemente tener el nombre de Alexandre Desplat no ya asociado al proyecto, sino dirigiéndolo musicalmente es una clara garantía de calidad. Un disco para amantes de lo melódico, la música camerística y las corrientes minimalistas (aunque no es un disco minimalista, que quede muy claro).
Lo mejor: Las adaptaciones realizadas por Alexandre Desplat.
Lo peor: Cierta sensación de monotonía producida por lo reducido de la formación, algo que podría ir a peor de no ser por las excelentes reorquestaciones de Desplat.
El momento: Me quedo con esa versión de Le Mépris de George Delerue.
DDBSpawn (David Doncel)
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