Tracklist:
- Prolog (01:56)
- Piesn Jana (02:51)
- Piesn Heleny (04:40)
- Atak Kozakow (02:45)
- Bezkresny, szeroki stepie... (03:06)
- Dumka Bohuna (00:49)
- Gniew Bohuna (02:06)
- Szarza jazdy polskiej (01:50)
- Obrona Zbaraza (03:41)
- Pan Longinus (03:18)
- "Ruta Miata" (01:09)
- Husaria ginie (03:56)
- Bitwa (04:04)
- "Na zielonej Ukrainie" (01:33)
- Pan Onufry Zagloba (01:28)
- "Dajcie dziewke?.." (02:57)
- Rzedzian i Kozacy (01:53)
- "Zegnaj mila... posel to swieta rzecz..." (02:38)
motyw "Na zielonej Ukrainie"
- Rozpacz Jana (00:57)
- Bunt ("Ty bys we krwi utopil...") (01:54)
- "A kto tu jest szczesliwy na tej Ukrainie ?" (04:25)
- Jar Horpyny (02:11)
- Helena w kapieli (01:43)
- Tatarzy (02:10)
- Piesn Heleny (04:39)
wersja instrumentalna
- "Na zielonej Ukrainie" (01:42)
final
- "Dumka na dwa serca" (02:48)
Wykonanie Edyta Gorniak i Mieczyslaw Szczesniak
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Cuando a Europa le da por imitar modelos americanos en el cine, un posible riesgo es que a veces les falten medios, así que si nuestros simpáticos amigos polacos la emprenden con una superproducción de aventuras épicas de tres horas sobre las batallitas entre Polonia y Ucrania, uno siempre puede dudar si van a igualar a una película hollywoodiense en cuanto a vestuario, puesta en escena, efectos especiales... Al fin y al cabo eso es una cuestión de dinero, y dinero es algo que en USA sobra, y en Europa tiende a faltar. Tenemos también otras pegas, como por ejemplo si un director europeo no acostumbrado a una narrativa épica va a ser capaz de hacernos interesante la historia que cuenta... Pero si hay algo que no es necesario dudar nunca, es que quizá la puesta en escena hace el ridículo, quizá el director es más pesado que un abuelo hablando de la guerra del catorce... Pero la música siempre va a estar a la altura. Y no es una afirmación gratuita. Es simplemente que con un proyecto como "Ogniem I Mieczem", era difícil fastidiarla. Y mucho menos en Polonia, país con una sorprendente cantera musical donde no es necesario irse a los de siempre (Preisner, Kilar...) para gozar de una garantía de calidad.
El señor Krzesimir Debski (1953) había hecho poca cosa y siempre en su Polonia natal, pero a raíz de la banda sonora para "Ogniem I Mieczem", ha obtenido el reconocimiento de un publico internacional que se ha visto totalmente desbordado por una banda sonora rica, variada, potente y épica, que no sólo haría las delicias de cualquier director hollywoodiense en busca de su siguiente tostón de tres horas para los oscars, sino que además es la música que a muchos compositores americanos establecidos cómodamente en su sillón les gustaría haber escrito. Krzesimir Debski nos ha dejado con la boca abierta y nos ha demostrado (como también lo ha hecho Roque Baños en España) que a veces imitar modelos americanos también significa superarlos.
De hecho, la banda sonora es lo mejor de este "Ogniem I mieczem", que se tradujo en España como "A sangre y fuego". Me cuidaré mucho de hablar sobre adecuación, porque la versión original que se distribuyo en Polonia duraba tres horas, y para el resto del mundo los responsables han montado una versión de dos horas y veinte minutos "adaptada a los gustos de un público no polaco". Esta afirmación me resulta totalmente sospechosa, y temo que hayan podido realizar un desaguisado. Por supuesto no es un crimen bestial como sustituir a Jerry Goldsmith por Tangerine Dream en "Legend", o Eric Serra por Bill Conti en "El gran azul", pero viendo la versión de 140 minutos, me da la sensación de que a la música también la han tocado, y no sólo porque falten varios temas notorios del CD, sino porque incluso la canción final ha desaparecido de los créditos y a veces la música da una sensación de no pertenecer a la escena. Esto bien puede ser por una inutilidad de los responsables directos (músico y montadores) pero una vez que los ejecutivos ya han metido mano en otras áreas, cualquiera sabe de quien es la culpa.
En realidad, esos pequeños detalles musicales no son tan importantes, pero es una pena que parte del material más jugoso del CD no se encuentre en la versión de la película para el resto del mundo. Nosotros nos lo perdemos. Lo que sí es seguro que millones de polacos han disfrutado de la versión buena, ya que el film ha sido un éxito total (lo típico que se dice: "recaudó más que El Rey León y Titanic"). Hombre, una vez vista la versión recortada y dándole el beneficio de la duda a la versión completa; pues no era para tanto. Vale que es una película de factura intachable: toda la producción; puesta en escena, vestuario, efectos y demás es perfecta, digna de cualquier película de altísimo presupuesto, y vale que el director no es ningún inútil. El hombre tiene idea de cómo explicar historias... El problema es que la guerra entre Polonia y Ucrania no es sólo que sea de interés limitado para nosotros pobres no-polacos, sino que además, si había alguna posibilidad de que el film internacionalizara una historia tan localista haciéndola atractiva y entretenida, esa posibilidad queda chafada por el montón de información que se nos da sobre un conflicto del cual la mayoría de nosotros no tenía ni idea antes de empezar a ver la película.
Así pues, este "A sangre y fuego" es un poquito difícil de seguir, pero es disfrutable gracias a su voluntad de gran espectáculo y sus ganas de ofrecernos aventuras, amor, historia y espectáculo a raudales. Y lo consigue, ayudado en gran medida por la música.
Si escuchamos el disco a secas sin ver el film, el resultado es sorprendentemente evocador. Teniendo unas pocas pistas del argumento, nos es posible crearnos nuestra propia película en la mente. Por ejemplo, el mágico "Prolog" con esas voces misteriosas, sin duda debe corresponder a una serie de letreros interminables al principio del film explicando todo el rollete del lío con Ucrania. "Dumka Bohuna" es sin duda una canción cantada por un tipo grandote sentado ante una hoguera en medio del bosque con sus camaradas... "Ruta Miata" es una canción que nuestros héroes escuchan en una taberna... y "Na Zielonej Ukrainie (final)" son unos créditos que no van subiendo en vertical con la lista del "cast", sino que van apareciendo los nombres uno a uno en pantalla de manera individual y explosiva. Estilo "Written and Directed by", y luego los nombres de los actores uno a uno, y luego el título "Ogniem I Mieczem", y entonces el tema finaliza y comienza la canción "Dumka Na Dwa Serca" acompañando a la lista del cast que sube en vertical. Esto es sólo un ejemplo de lo que uno puede imaginar sin haber visto el film (el resto de los temas que he obviado son simples batallas o temas románticos) y lo bueno es que una vez vista la película algunas de las ideas sí que eran acertadas, pero otras no. Pocas bandas sonoras son tan evocadoras como para hacerte imaginar la película completa aun sin haberla visto. Vale que luego no aciertas en la mitad, pero el hechizo ya esta lanzado.
Y es que este disco tiene mucho que destacar. Nos encontramos ante una banda sonora totalmente sinfónica con coros y una soprano solista, que mezcla con habilidad orquestaciones potentes y música tradicional ucraniana. La variedad de temas es extraordinaria, y todos tienen su espíritu propio. El tema de Helena ("Piesn Heleny") es una de las bases sobre las cuales se sustenta el score, y su belleza es impactante. "Piesn Jana" conforma otro de los temas principales, y "Na Zielonej Ukrainie" es un bonito tema folklórico que conocerá una estupenda versión orquestal en los créditos finales. Sospechosamente en la versión que yo vi, se repetía todo el rato en un bucle, lo que me hizo pensar que querían ocultar la canción. Y es que hay canción, por supuesto. En un intento de imitar modelos americanos, ¿qué mejor que incluir una canción al final del score para "vender más el disco"? Y eso es lo que han hecho. Las estrellas de la música polaca Edyta Gorniak y Mieczyslaw Szczesniak desgranan un dueto que no desentonaría en una radiofórmula, pero por que quejarnos? Si James Horner lo hace y vende montones de discos, ¿por qué no puede hacerlo Debski? Al fin y al cabo se está intentando seguir un modelo americano y la inclusión de una canción al final del CD no desprestigia al resto del score. Incluso suena divertida (aunque ésa quizá no fuera su intención). O si no, escuchad temas tan potentes como "Atak Kozakow" o "Szarza Jazdy Polskiej" y decidme si os importa algo encontraros con una baladita romántica al final. Y es que este Krzesimir es un descubrimiento monumental. "Ogniem I mieczem" son 27 temas y ninguno suena a relleno. Incluso existe en Polonia una segunda edición (al estilo de "More music from...") que os comentaré de buena gana si algún día cae en mis manos, porque después de esta demostración de fuerza y talento musical, este hombre es una figura a seguir. Krzesimir se mueve igual de bien en los temas de acción que en los románticos. Krzesimir mezcla la ya clásica sensibilidad europea para la melodía con la potencia de una orquesta completa que no desentonaría en una superproducción Hollywoodiense. Krzesimir consigue que nos quedemos pegados al altavoz de nuestro reproductor. Krzesimir consigue que nos traguemos una película un poquito ladrillo como "A Sangre y Fuego" sólo para disfrutar como enanos a cada minuto que su música aparece en pantalla. ¿Obra maestra? ¡¡Por supuesto!!
Lo Mejor: Que este hombre nos desborda con cada nota.
Lo Peor: Que la versión no polaca del film plantea demasiadas dudas sobre que ha pasado con la música.
El Momento: "Na Zielonej Ukrainie (final)".
Rubén Sánchez
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