Tracklist:
- Main Titles (03:49)
- Ape Suite #1 (03:52)
- Deep Space Launch (04:35)
- The Hunt (04:58)
- Branding The Herd (00:48)
- The Dirty Deed (02:27)
- Escape From Ape City / The Legend (05:57)
- Ape Suite #2 (02:42)
- Old Flames (02:10)
- Thade Goes Ape (02:37)
- Preparing For Battle (03:26)
- The Battle Begins (05:17)
- The Return (07:18)
- Main Title Deconstruction (04:22)
- Rule The Planet Remix (04:03)
Remix by Paul Oakenfold
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Crítica 1:
Muchos somos los que esperamos con impaciencia y emoción el estreno de la última película de Tim Burton. Primero, porque es de Tim Burton y, segundo, por ser el tan esperado remake de una de las mejores películas de ciencia-ficción de todos los tiempos, "El Planeta de los Simios". Personalmente, no soy muy amigo de los remakes. Si un artista realiza una obra, cargada con su personalidad, no sé a qué viene lo de que venga otro a intentar mejorarla, o ni tan siquiera repetirla. ¿Dónde queda la subjetividad del creador, ahí? En fin, podríamos pensar que, tratándose de una creación de Hollywood, se oculta un poco la aportación de un autor en concreto bajo la miríada de nombres que aparecen en los créditos. Pero ya digo que habrá que esperar y ver. Por lo pronto, el mismo Burton reconoció que tampoco era exactamente un remake. Tratándose de él, nos los podemos creer.
Para el apartado musical, como en lo mejor (qué rayos, en casi todo) de la factoría Burton, tenemos a Danny Elfman. Parafraseando a Ben Kenobi, ¿quién mejor que un loco para seguir a otro? Uno de los mayores temores que teníamos los aficionados era preguntarnos cómo afrontaría Elfman este trabajo, con el precedente de Goldsmith a sus espaldas. Temores justificados, la verdad. No hay más que recordar el pobre trabajo de Elfman reescribiendo nota por nota la partitura de Herrmann para el irregular remake de "Psicosis".
Así pues, la pregunta era ¿repetirá Elfman la partitura de Goldsmith para el primer y original "Planet of the Apes", la reversionará, la reinterpretará o tirará por sus propios derroteros? La respuesta está frente a mí, en el CD con el score para este nuevo "Planet of the Apes". Pulsemos "Play" en el reproductor y averigüémoslo.
Vaya, creo que hemos conseguido la respuesta casi instantáneamente. Este "Main Titles" no se parece en nada al tema que compusiera Goldsmith en su día. Es más, goza claramente del estilo característico de Elfman. Nada mejor que empezar una historia de este corte con una marcha militar. Mezclando sintetizadores e instrumentos de percusión, e incluyendo algún parecido razonable con el tema de Marte de Holst, somos introducidos de lleno en la película. Esto último es curioso, por la semejanza con el tema principal de "Mars Attacks!". Este primer tema y el siguiente, una suite, nos sirven de introducción a las melodías y leiv-motifs que Elfman va a utilizar a lo largo de todo el CD.
La verdadera acción no comienza hasta el tercer tema, "Deep Space Launch", a partir del cual la música ya sí es utilizada para narrar la historia. Elfman se sirve de variaciones, más o menos intensas, del tema principal. Y en el siguiente tema llegamos a uno de los momentos más prometedores de la historia. Como su propio nombre indica, "The Hunt". Después del trepidante tema homónimo de Goldsmith (lo siento, pero las referencias y las comparaciones se hacen obligatorias), cualquier aficionado esperaría un tema antológico, a la zaga de su antecesor. Elfman comienza el tema tranquilito, sin adelantar nada de lo que nos espera. Hasta que, cercanos al minuto, nos ataca con unos ritmos muy marcados, heredados directamente del tema de cierre de "Sleepy Hollow", seguidos del tema principal. Sí, muy bonito, pero decepcionante. No llega de ninguna de las maneras a superar a Goldsmith, lo siento. Conociendo a Elfman, me había hecho unas espectativas en ese tema en concreto y no las ha superado.
Siguiendo con el resto del CD, Elfman se repite con los dos o tres temas para la película. Se aprecian muchas reminiscencias a trabajos anteriores como los ya nombrados "Sleepy Hollow" y "Mars Attacks!", e incluso "Batman Returns" y Mission: Impossible. De hecho, sigue mucho la línea marcada por "Sleepy Hollow", pero eliminando los toques románticos (por la época, no por las escenas de amor) de ésta.
Conforme el CD se acerca a su final, encontramos temas muy intensos en los que la orquesta juega un papel muy importante, como "Preparing For Battle" (con un ritmo fantástico, que transmite la intensidad del momento) o "The Return", que casi cierra el score. El penúltimo tema es una "Deconstruction" (por no llamarla reprise, vamos, digo yo) del tema principal, con un uso más pronunciado de la caja de ritmos y la percusión. Y cierra el CD un Remix infumable achacable a Paul Oakenfold. Debe ser la aportación a las cancioncitas maquineras para este verano, ya que en las terrazas se han puesto de moda los gorilas. En fin.
En resumen, habrá que esperar a ver la película para emitir un juicio definitivo. La versión de Goldsmith se ajustaba excepcionalmente bien a las imágenes, y habrá que ver si con ésta nueva pasa lo mismo. Lo que es seguro es que a los incondicionales de Elfman les gustará, en mayor o menor grado, pero les gustará. Vamos, a mí me gusta, y bastante. Pero sé que Elfman es capaz de mucho más y todavía es muy joven como para considerarlo encasillado.
Lo Mejor: Los ritmos trepidantes, marca de la casa Elfman.
Lo Peor: Que no aporte nada nuevo.
El Momento: "Main Titles".
Bac Hylon
Crítica 2:
El reinado de la percusión es la tendencia habitual de este gran compositor, buscar la atonalidad y alejarse de la melodía, algo impensable hace unos años donde vivíamos entusiasmados por el grado de creatividad musical de este genio, gracias a melodías góticas con tintes circenses, tiene su punto de perfección en la BSO compuesta para el 'No-remake'(como se empeñan en hacernos creer) de Burton.
La percusión es la que establece la dirección a seguir, algo que simplemente encanta a Elfman, ensimismado en su ultimo tramo creativo por los sonidos contundentes de la percusión limitados por los requerimientos de las imágenes. Ahora sin esa justificada limitación, Elfman compone su partitura, menos 'Burtoniana', al encontrarnos ante la película con menos huella evidente de su director.
El Barroquismo y los tintes góticos de este niño rebelde de Hollywood dan paso al salvajismo de los movimientos simiescos (lo mejor de la película) y al vanguardismo de sus corazas. Elfman, intencionadamente o no, tiene presente en todo momento esas dos cualidades. La primera, el salvajismo, es la que invade toda la partitura, gracias a percusiones de todo tipo (hasta golpes en latas de cerveza), con esos ritmos tribales tan magníficamente coreografiados. La segunda, el vanguardismo de los diseños, especialmente ejemplarizado en las corazas del ejercito simiesco, representada en la música por sonidos electrónicos.
Así aparece el tema principal, distinto en el CD, ya que el que aparece en la película es una remezcla un tanto mutilada de la versión original. Elfman con el reinado de la atonalidad percusiva, crea inesperadamente melodía, estableciendo un nuevo tipo de sonido Elfman, intencionadamente cultivado en Men in Black, convirtiendo el tema principal de "El Planeta...", en caldo de cultivo para una posible denominación futura de 'obra maestra'. Los temas de acción son marca de la casa, con grandes secciones de orquesta a merced de las escaramuzas entre humanos y simios. Es el eje central de todo el CD, y toda la composición de Elfman.
Pero también hay momentos apacibles donde se refleja la extraña relación entre el Capitán Leo y Ari, con la orquesta decididamente calmada y el sintetizador creando el ambiente sutil que contrasta llamativamente con el resto del score.
El problema surge cuando aparece el fantasma de las comparaciones, un ejercicio necesario, por mucho que le pese a Burton. En esta nueva versión se intenta reinterpretar una historia ya de por sí perfecta, tanto en sus planteamientos, como en su definición. La futilidad de tal ejercicio es obvia desde un primer concepto de tal cruzada, en las mentes, no sólo de los aficionados, sino de los propios creativos. Innumerables han sido los directores que han querido desentenderse del proyecto, por la imposibilidad, no sólo de superar al original, sino de intentar ajustarse a su magnífico nivel.
Burton no fracasa en su aislado ejercicio de divertir, pero se ve derrotado, y por clara diferencia, al compararse inevitablemente con el original. El guión que le sirve de dirección es predecible y vanal (como la inmensa mayoría de guiones que suele últimamente llevar a imagen Burton) con un desenlace forzado y posiblemente plagiado (De su 'amigo' Kevin Smith), sin ese grado de frustración y maestría del original.
Goldsmith es el punto de referencia, pero extrañamente no para el compositor de cabellos rojizos, sino para el aficionado. Ahí esta el problema: intentar evaluar conjuntamente dos partituras que son totalmente diferentes. Si bien Burton se engaña a sí mismo diciendo que no es un Remake lo que lleva a cabo, Elfman no lo hace en ningún momento, siendo consciente de que su partitura busca otros caminos, más fieles a su estilo que a los del magnífico compositor de Mulan. Elfman se muestra claro vencedor frente a un director que cada vez se ve más engullido por la falta de originalidad imperante en la industria, que desde Ed Wood, no levanta cabeza.
El planeta de los Simios de Elfman es una pieza clave en la discografía de su autor, con un mayor disfrute dentro de las imágenes que fuera de éstas (la atonalidad percusiva no es precisamente plato de melodías ejemplares), y todo aficionado y no aficionado tiene que ser consciente de la naturaleza y destino de esta música antes de dar su definitivo veredicto, algo obvio en la música de cine, pero con más razón en esta partitura si cabe.
DDBSPawn
Publicado originalmente en Filomúsica.
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