Tracklist:
- A Grand Day Out (01:54)
- Anti-Pesto To The Rescue (03:18)
- Bless You, Anti-Pesto (01:56)
- Lady Tottington & Victor (02:03)
- Fire Up The Bun-Vac (01:47)
- Your Ladyship (01:07)
- Brainwash & Go (02:28)
- Harvest Offering (02:30)
- Arson Around (02:23)
- A Big Trap (03:27)
- The Morning After (01:44)
- Transformation (04:05)
- Ravaged In The Night (01:45)
- Fluffy Lover Boy (04:36)
- Kiss My Arrrtichoke (04:31)
- Dogfight (03:39)
- Every Dog Has His Day (02:43)
- All Things Fluffy (01:07)
- Wallace & Gromit (01:08)
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Nick Park, el genio
Como todo genio, Nick Park nació interesado por esa inquietud cultural que lo marcaría de por vida. De niño, a la edad de 13 años, jugueteaba ya con la animación en el ático de su casa, haciendo sus primeras películas. Evidentemente, los estudios que le esperaban eran aquellos que se centraban en esta especial predilección. Así, estudió animación en la National Film and Television School en Beaconsfield. Durante su estancia en este colegio, empezó a confeccionar el primer corto de Wallace y Gromit, A Grand Day Out, que no lo terminaría hasta que en 1985 se unió a Aardman Animations.
El primer Oscar llamó a su puerta en 1990 por su trabajo para Creature Comforts, que estaba incluido en la serie para el Canal 4, Lip Synch, creada por Aardman Animations.
Ese fue el principio de un camino de logros que lo colocarían en lo mas alto de la animación tradicional con plastilina. Un genio que con sus creaciones ha conseguido lo que muchos desean, la inmortalidad.
Los Cortos
Tres son los cortos que protagonizaron Wallace & Gromit y que realizó su padre, Nick Park:
- A Grand Day Out: Evidentemente, se nota y mucho que este es el primer corto que estos dos personajes protagonizan. Sin duda es el peor, evidenciándose la falta de perfección en el modelado de los personajes, menos estilizados y más afeados. El guión no es nada del otro mundo. Wallace está aburrido y convence a Gromit para realizar una nave que los lleve a la Luna, pues allí todo está hecho de queso, y como bien sabemos, Wallace es un vicioso de este alimento. En la luna encontrarán un habitante un poco especial que no les hará su estancia nada tranquila, como nuestros protagonistas tenían planeado a priori.
A pesar de ser el corto menos conseguido, fue el que presentó a los personajes en sociedad, algo que acarreó múltiples premios, los Bafta, los British Animation Award, etc.
- Wrong Trousers: Este es sin duda el mejor corto de Wallace y Gromit . La animación dio un salto cualitativo sin precedentes. Marcó el estilo y el aspecto físico definitivo de sus personajes y presentó uno de los mejores guiones de un corto animado. Si a esto le añadimos la aparición de uno de los mejores villanos que se ha presentado en una historia infantil, ni que decir tiene que estamos ante uno de los cortos de animación mas conseguidos de la historia y el mejor hecho en plastilina. Prueba de ello es el Oscar que recibió.
Wallace necesita alquilar una de las habitaciones de su casa en vista de la mala situación económica por la que atraviesan. El inquilino es para no olvidar: un pingüino con ningún don de palabra y bastante arisco. Gromit, sospecha poderosamente de él y de sus intenciones, por lo que que utiliza todo lo que está su alcance para descubrir al pingüino cometiendo sus inconfesables fechorías. Es cuando aparece la nueva creación de este dúo, "Los pantalones mecánicos".
- A Close Shave: Muy en la línea de calidad de Wrong Trousers, aunque no superándolo en cuanto a guión, este corto recibió también el Oscar en su año de presentación.
La animación de A Close Sabe (Un afeitado apurado), va un paso más allá, demostrando lo magistral de la técnica animada de este genio que es Nick Park y su estudio. La historia es más que interesante, contándonos cómo Wallace y Gromit se meten a limpiadores de cristales. Wallace conoce a Wendolene, y se enamora perdidamente de ella… pero su destino le tiene reservado una mala pasada, pues será encarcelado al ser acusado de un delito que no ha cometido.
Un corto magnífico que nos tiene reservado un especial homenaje al Terminator de James Cameron.
Wallace & Gromit en pantalla grande
Era algo inevitable que, después de ver el éxito cosechado por los dos personajes en sus historias cortas, gracias a los múltiples premios que parecían acumularse espectacularmente, las aventuras de Wallace & Gromit saltasen a la pantalla grande, con una historia más estirada con tal de alcanzar un metraje idóneo para la exhibición en salas comerciales.
Y sorprendió que el primer paso al largometraje de Nick Park no fuese precisamente con sus hijos predilectos, sino con unas gallinas valerosas que imitaban las andanzas de Steve McQueen en The Great Escape. Hablamos, por supuesto, de la estupenda Chicken Run, una divertidísima película paródica que parecía presagiar una gran camino de Park en este terreno del largometraje.
Finalmente, Wallace & Gromit serían el siguiente proyecto de Park para un largometraje. En este caso buscarían adaptar a su propio interés la mítica historia del Hombre Lobo, evidentemente dotándolo de un tono cómico tan propio del autor. Así nació Wallace & Gromit: The Curse of Were-Rabbit que no tiene nada que ver con el titulo español Wallace y Gromit: La maldición de las verduras, sino más bien al juego de palabras entre hombre lobo y conejo lobo.
El humor intrínseco que encontramos en el título también se haya, evidentemente, a lo largo y ancho de todo el metraje.
El gran problema que tiene esta produccion animada es que parece haber perdido parte de la gracia que identificaba a los personajes. El guión se ha hecho más infantil, evidentemente encaminado a atrapar a ese sector del publico, tan receptivo a demandar cantidades astronómicas de sus muñecos, videojuegos o estampitas. Eso ha perjudicado enormemente a la película, que se presenta como un divertimento demasiado inocuo para el acompañante adulto, quien podía encontrar en los cortos anteriores más de un elemento que lo motivaran a mantener la atención. En este caso, uno no puede dejar de ser atacado por cierta sensación de tedio.
Aparte, el guión no aporta situaciones imaginativas de plena brillantez como podíamos encontrar en el corto Los pantalones equivocados, sino que sigue la regla convencional de los guiones infantiles: personajes esteriotipados, bromas visuales simples y una cantidad importante de personajes encantadores: los conejos.
Además, parece como si los creadores hubiesen llegado ya a un tope de innovación tecnológica, pues no encontramos ningún plano o genialidad en la dirección que sí encontrábamos en los anteriores cortos.
Una cierta decepción, que se extiende de igual manera a la banda sonora.
Una banda sonora muy divertida, pero convencional
Una de las características más originales de los cortos era sin duda la banda sonora de Julian Nott. A modo de fanfarria circense propia de otros tiempos, Nott nos presentaba a los dos personajes confiriéndoles una sensación añeja que casaba como un guante con sus aventuras. Esa magnifica partitura ha sido invadida en la película por sonidos mediaventures ya escuchados en Chicken Run o Steamboy.
De ahí que el único elemento plenamente original de la película haya sido invadido por lo convencional, aunque, eso sí, no por ello menos divertido. Esta mediaventurización se traslada principalmente en el sentido abrumador de la acción y algún que otro leitmotiv marca de la casa, ciertamente más propio del John Powell animado que de los nombres que están detrás de esta partitura (léase James Dooley o Rupert Gregson-Williams, compositores sin ninguna personalidad).
Que en la producción estéHans Zimmer, algo que se publicita encarecidamente hasta en los títulos de presentación del film (compruébese aquí por tanto el gran poder que el compositor alemán tiene en la industria hollywoodiense actual, donde su nombre se vende a modo de franquicia, y no es para menos), es un importante detalle que plantea el rumbo que la partitura seguirá. Desde mi punto de vista, es indiferente que esta sea compuesta por Julian Nott, Rupert Gregson-Williams, Lorne Balfeo James Dooley. Mientras Zimmer esté detrás como productor, está claro que el sonido que escucharemos será el suyo (algo que ya se comprobó en la flojísima partitura para The Island de Steve Jablonsky).
Evidentemente, el más perjudicado no es ya el aficionado a la música de cine, que comprueba como esta partitura que teníaa visos de ser ciertamente original con la aportación de Nott, se queda en un “más de lo mismo”, sino también el propio Nott, que tenía una oportunidad única para dar un paso definitivo al largometraje y que se ha visto totalmente relegado en el resultado final por personas que ya están establecidas en este mundo, y con buenas agarraderas.
Una partitura muy variada
A pesar de esa falta total de originalidad, diversión no le falta a esta partitura, como ya hemos comentado, y eso es debido al amplio abanico de leitmotivs que mucho me temo es consecuencia directa de todos los compositores que han hecho música para esta película (cinco, nada más y nada menos). En una escucha detenida podemos encontrar los siguiente leitmotivs con cierta importancia en la partitura:
El tema de Wallace y Gromit: Es el mítico tema de Nott. Se utiliza bastante poco en la película, y completo sólo en su principio y en su final. Lo podemos escuchar en “A Grand Day Out” (escuchar) y el corte que cierra el disco “Wallace and Gromit".
Wallace y Gromit en acción: Es un tema muy dinámico que se presenta por primera vez en “Anti-Pesto to the Rescue” (escuchar). Es muy deudor de los sonidos Mediaventures de Chicken Run, incluso mira de soslayo en algún momento a The Man in the Iron Mask en algúna interpretacion más tranquila, escúchese el principio de “A Big Trap”.
El tema del Conejo-Lobo: Es un gran leitmotiv, más propio de una película de Stephen Sommers a lo Van Helsing que de Wallace y Gromit. Es un tema oscuro y amenazante, tan excesivo como las imágenes requieren. Podemos escucharlo en “Transformation” siendo aquí totalmente protagonista, y acompañado de unos sobrenaturales coros (escuchar).
El tema de amor: La singular atracción que Wallace siente por Lady Campanula viene representada por un tema melódico, retentivo, que puede escucharse en “All Things Fluffy”.
El tema de Lady Campanula: Con evidente sabor aristocrático, deudor de nuevo de sonidos escuchados en The Man in the Iron Mask, es un leitmotiv corto que la mayoría de las veces se ve ninguneado por la inclusión del tema de amor.
La creación: Es un tema que se asocia con lo sobrenatural y lo desconocido. Aunque en un principio podríamos esperar que fuese oscuro y tenebroso, es todo lo contrario, despidiendo una gran sensación de bondad y belleza (escuchar). Lo podemos escuchar en "Brainwash & Co".
Partitura intrascendente pero ciertamente divertida. Una pena esa falta de originalidad que podría hacer de esta composición una rareza entre un mar de clones. Tristemente no ha sido así, y tenemos un volumen mas en la amplia discoteca que es la filmografía de los Mediaventures.
Lo mejor: Lo variado y lo divertido de la partitura.
Lo peor: Suena a mil cosas ya escuchadas.
El momento: El tema de Wallace y Gromit, ya sea el corte “A Grand Day Out” o “Wallace and Gromit”, obra de Julian Nott.
DDBSpawn (David Doncel Barthe)
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