X-Men 2

Título en español : X-Men 2
Compositor : Ottman, John
Año : 2004
Distribuidora : --
Duración : CD 1 52:34 / CD 2 51:24

Análisis del disco editado comercialmente y del promocional con la partitura completa en dos discos (104 min.) producido por el compositor

Nuevo integrante de la patrulla X: John Ottman

Llegaba el momento de la verdad, aquél para el que se había estado preparando durante largo tiempo, llegaba su momento soñado. Tres años atrás una incompatibilidad de fechas le impidió acceder a este anhelo, su compromiso como director, editor y compositor con “Urban Legends: Final Cut” evitó su unión a la franquicia de los X-Men desde el principio. El compositor encargado del reto fue Michael Kamen y el resultado fue la división de opiniones general, con una conclusión común, no le había sacado todo el rendimiento exigible al material de partida. Comenzaba el año 2003, los caminos de John Ottman y la saga de los X-Men se habían cruzado, por fin.

Un tema perfecto para los superhéroes

Se encontraba frente a los mejores condicionantes posibles, la confianza plena del director, Bryan Singer, a su vez uno de sus mejores amigos, y la de los productores, la frescura que le proporcionaba afrontar un género por primera vez y su visión como montador que le iba a permitir integrar aún mejor imágenes y música. El reto estaba frente a él. Y éstos fueron los resultados.

Todo comenzaba por la creación de un tema que pudiera considerarse definitivo, que a partir de ahora se asociase inmediatamente a los X-Men tras oír sus primeras notas, que impresionara por su fuerza y su épica, retentivo y que admitiese variaciones. El “Main Title” para los X-Men se caracteriza por satisfacer todo ello y por permitir una evolución en su desarrollo, mediante pequeñas pinceladas a lo largo de la partitura, hasta su tratamiento final completo.

Uno de los deseos más ansiados por Ottman era por tanto, lograr componer ese tema perfecto que definiese a los héroes. Pero su afán era crear un motivo musical, que aún tan solo con la escucha de unos breves segundos, se diferenciara del resto, que nos colocara instantáneamente dentro del mundo de los X-Men, evitando la comparación con otras composiciones para superhéroes. Como objetivo primordial, quería crear algo no totalmente nuevo, sino distinto. Como resultado y para felicidad de todo buen aficionado a este tipo de cine podemos decir sin temor a equivocarnos que sin duda el tema principal compuesto por John Ottman para “X2:X-Men united” logró esto con creces.

Se introduce el arpa, unos coros mixtos en la lejanía nos sugieren misterio, una obertura para una nueva saga se inicia. Entran los metales en primer término y una percusión atronadora y revitalizante nos prepara, los timbales marcan el ritmo y la sección de viento de la orquesta da lo mejor de sí misma. Ha sido la presentación del X-Men theme, tan solo un minuto que ya nos deja extasiados, un minuto que se desarrollará mediante pequeños apuntes a lo largo de la partitura, hasta la colosal culminación final donde se desplegará en su total y grandiosa dimensión. Momento en el cual el compositor no se impone limitaciones para darlo todo en una Suite fastuosa y apabullante, en la cual la extrema potencia de la interpretación por parte de la orquesta, que da lo mejor de sí, del emocionante y poderoso motivo principal, precede al recorrido por los mejores momentos de la partitura, que iremos comentando, para regresar con aún más vigor si es eso posible en una conclusión que, sinceramente, deja sin aliento.

Sorprende, sin embargo, frente al interés por la frescura y originalidad características de John Ottman, que el compositor se plegara a la utilización del “Dies Irae” de Mozart para ilustrar el ataque del Rondador Nocturno a la Casa Blanca (“White House attack”), en lugar de una composición propia. La razón, la petición del director de emplear un gran tema coral clásico para la misma (tema que curiosamente no se encuentra incluido en la presentación oficial en CD de la partitura, aunque sí en su edición promocional). Ottman arregló la parte coral para que coincidiera con los tiempos en pantalla y con la percusión original, que él había modificado ligeramente. La verdad es que el inicio del tema, acompañando los travellings que recorren y nos muestran la Casa Blanca antes del ataque y la presentación del Rondador Nocturno con la fuerte entrada de los coros, queda como un guante con las imágenes, impactando aún más si cabe cómo establece un ritmo trepidante junto al montaje.

Temas y motivos por personaje

Un dato destacado es la presencia a lo largo de toda la partitura, no de un tema completo, pero sí de un motivo de varias notas para casi cada uno de los personajes, además de los temas genéricos dedicados a los X-Men, a las fuerzas de Magneto y a los militares de Stryker (el villano principal) como grupo. Pasaré a comentar estos temas y a señalar donde están ubicados dentro del Score:

X-Men: ya comentado anteriormente, aparece como Overtura en el “Main title”, como prólogo en “Sneaky Mystique”, y a modo conclusivo de temas como “We´re here to stay” y “Life goes on/The lake”. Su completa representación se encuentra en la “Suite from X2” que se desarrolla a lo largo de los títulos de crédito del film. Impresionante, pura magnificencia.

Tema que representa peligro o amenaza: aparece representado a escala completa en el tema “Mansion attack” graduando la tensión de la escena de la invasión de la escuela para Mutantes del Profesor Xavier, por parte de los militares (tema de Stryker). Se desarrolla a lo largo de siete minutos, acompañando las acciones en pantalla, con un predominio de la melodía y la búsqueda de la emoción, obviando la atonalidad. Intriga y suspense a raudales.

Magneto: podemos hallar un completo desglose del mismo en los temas “Magneto escapes” con la ayuda del piano y unos casi imperceptibles coros, que dan paso a la fuerza de los metales (en ciertos momentos parece incluso recordar tenuemente al Danny Elfman de “Batman” –entre los 00:48 y los 00:59 segundos-) y “Magneto´s old trick” con un tratamiento más ámplio y pausado del tema en el que reincide en el homenaje a Elfman pero con mayor fuerza épica aún, y guiños al tema de los X-Men (como dando a entender que aún siendo el villano pertenece por derecho propio al grupo mutante, y dando sentido musical a su posterior unión temporal). Solemne y cautivador. Son reseñables las similitudes entre este tema y los compuestos por Ottman para “Apt pupil” (“Recognition”) y “Snow White” (“Main Theme”).

Cerebro: representa el ingenio creado por el profesor Xavier, y que permite hallar a cualquier mutante en cualquier parte del mundo. Se trata de un tema descriptivo, puro acompañamiento de las imágenes, que adopta la forma de un vals decadente y circular (“Cerebro”) de gran lirismo en su parte final. Existe otro momento musical “Opening Cerebro” dedicado a este elemento de la trama, pero en este caso se trata de crear tensión y la atonalidad y breves apuntes de la tuba no nos ofrecen un mayor desarrollo (asimismo muy apegado a las imágenes, sin especial importancia fuera de éstas).

Mística: “Sneaky Mystique” presenta algún elemento del tema de Michael Kamen del primer film (nueva petición de Bryan Singer) en el inicio para pasar por el tamiz Ottman con los coros femeninos, glissandos al arpa y la percusión sobreexcitada de su desarrollo posterior, hasta concluir entre la oscuridad y el suspense más atonal. “Death strike Deathstryke” ofrece la versión “non stop action” del motivo cerrando con los citados coros marca Ottman.

Rondador Nocturno: “Meeting Nightcrawler” y “Finding faith” nos desglosan este tema con el que el compositor representa el misticismo y la fé como forma de vida, de uno de los superhéroes más curiosos de la historia de cómic (un ser totalmente azul, con cuerpo de demonio, orejas, cola y pezuñas, que tiene la capacidad de teletransportarse de un lugar a otro). Las notas del tema del grupo dan la entrada a un tema gótico y decadente (que sugiere quizá las raíces germánicas del personaje, Kurt Wagner, y su quebradiza y convulsa vida interior) con la inclusión de unos coros en alemán, que muestra su aspecto tierno y espiritual en contraste con el físico. La sección de cuerda con los violines en primer término se entremezclan con la de viento concluyendo de forma suave y relajada.

Jean y Logan: se podría decir que se trata del tema de amor, por su desarrollo melódico y su lirismo, así como la emoción contenida que desgranan sus notas. Aparece en el tema del mismo nombre y al final de “Lovers quarrel”. A pesar de todo, como en la película, no termina de culminar del todo, al igual que la relación entre sus protagonistas. Al final de la historia servirá como trágico leit-motif para el personaje de Jean Grey y su destino último, y mostrar su impacto sobre Lobezno, líder indiscutible de los X-Men tras el profesor Xavier, y alma guerrera del grupo, a quién los momentos más épicos de la versión más desaforada del tema principal representa.

Pícara: presente en los temas “Harmless kiss” y “Rogue earns her wings”, en éste último más desarrollado. Tras unas notas que rescatan el motivo de los X-Men con los metales, descubrimos el tema de “Pícara”, unas notas al arpa que se integran con el tema del grupo, para luego desarrollarse en solitario acompañadas de un coro femenino (reminiscente del tema principal que Ottman realizara para “Cruel Intentions”) resaltando la autoexclusión que este personaje se inflige para evitar que su poder haga daño, y su autoafirmación al lograr gracias a él integrarse por fin dentro de los X-Men con la entrada de los coros.

Pyro: dentro del tenso momento de la demostración de su facultad mutante frente a la policía en “Playing with fire”. Los tambores cargan de expectación el momento para dar paso al triángulo, sección de cuerdas y los metales, que con sus disonancias finales muestran el turbulento carácter del personaje, del que los pequeños apuntes gradualmente descendentes del tema principal anuncian su incierto futuro como integrante de la Patrulla.

Bobby (Hombre de Hielo): de nuevo el arpa sutilmente y casi subconscientemente nos caracteriza al personaje (un joven inmaduro con poderes mutantes, que acepta su condición, a pesar de la incomprensión de su familia, y que comienza a centrarse gracias a su incipiente relación con Pícara) cuando usa su habilidad para defender a un inocente de la bravuconería de Pyro, “What Bobby can do”.

Tormenta: “Storm´s perfect storms”, excelente momento para caracterizar musicalmente a Tormenta. Unas notas de flauta abren el tema de los X-Men, para dar paso a unos excelentes coros y a la perfecta mixtura cuerdas-viento con mención para el arpa, desplegando completamente el melódico motivo del personaje mientras el grupo es perseguido en el X-Jet y ésta despliega una serie de tornados y tormentas para protegerse de sus enemigos. El tema tiene un desarrollo más ámplio en la “Suite from X2” en la que podemos encontrarlo tras el tema principal y el del trágico destino de Jean Grey.

Acción y suspense

Ya fuera de la diversidad de motivos para los diferentes personajes, hay que destacar la variada gama de temas de acción propiamente dichos, que aparte de los ya comentados por la inclusión en los mismos de pequeños apuntes musicales representando a héroes y villanos, merecen destacarse por la complejidad de los ritmos y la fuerza orquestal desplegada por Ottman. Entre ellos podemos encontrar el potente “Death strikes Deathstryke”, la tensión in crescendo de “Getting out alive”,y el lírico y emocionante “Goodbye” que sobrecoge por la fuerza rítmica en su parte central(sin duda el mejor tema de suspense y acción de la partitura) y lo embriagador de su particular homenaje a los sucesos que llevarán en un futuro al nacimiento de un nuevo X-Men, Phoenix, en su antológico clímax musical entretejiendo el tema del grupo, Jean Grey y Lobezno con un emotivo toque de violín solista final.. Son reseñables asimismo la melodía nostálgica de “Alkali Lake”, “We´re here to stay” intimismo y un potente reflejo del tema principal y “Life goes on/The lake” exhilarante reconstrucción sutilmente coral de lo momentos más hermosos de la parte intimista del score (tema de Bobby, Rogue, Jean y Logan entrelazados) con una magnificente coda final, breve y majestuosa rendición al tema de los X-Men, acompañando la imagen de una sombra bajo el agua del Lago Alkali avanzando a gran velocidad, y la declaración de intenciones del Profesor Xavier, a la que se une con pasión y fervor musicalmente el compositor, “los mutantes están aquí para permanecer”.

Después de X-Men 2

John Ottman podrá gustar más o menos, pero no le podemos negar que con esta obra ha alcanzado un lugar de honor dentro de la emoción y la épica del cine de superhéroes, en algún lugar no muy alejado de maravillas para la historia como “Superman” de John Williams, “Batman” y “Spiderman” de Danny Elfman y “Rocketeer” de James Horner. Sin duda esto ha sido reconocido por la industria cinematográfica americana que le ha recompensado con los Scores para dos nuevos films basados en otros personajes de la antología del Cómic, como son los clásicos “Los Cuatro Fantásticos” y la nueva versión de “Superman”, de nuevo junto a Bryan Singer. El género está en sus manos, y esta vez, hay que posicionarse, probablemente en las mejores manos posibles. Porque como diría el Profesor Charles X. Xavier “la vida continua su progreso, habrá cambios y pérdidas, imprevistos y decepciones, pero John Ottman está aquí para permanecer...”.

Lo mejor: La variedad de temas y subtemas que el compositor nos ofrece a lo largo de toda la partitura, dedicando algún momento musical a todos y cada uno de los personajes y acciones de la trama, incluyendo un inolvidable leit-motif para los X-Men, alcanzando todo su esplendor y apogeo en la “Suite From X2”.

Lo peor: La excesiva atonalidad de ciertos momentos reposados, de acompañamiento de diálogos, cuando no se nos ofrece ningún tema principal, y la melodía o percusión no se despliega en su totalidad, quedando estos un tanto difuminados en el conjunto, “Sorry Charles”, “Fireside Chat”, o “Harmless Kiss”.

El momento: Como hemos señalado el impresionante tema dedicado al grupo de los X-Men en su conjunto, y el que el compositor no abuse del mismo a lo largo de la partitura “Suite from X-2”, “Main Title”, ”We´re Here To Stay”, “Life Goes On/ The Lake”; y los dos excelentes temas de suspense y acción presentes en “Mansion Attack” y ”Goodbye”.

Asier G. Senarriaga