Rara vez encontramos a una persona tan humilde y tan abierta
a comentar sus impresiones sobre el mundo del cine, y más
concretamente sobre la musica cinematográfica, como
nos ha pasado con
Sergio Moure, un compositor de cine que será desconocido para muchos,
pero que ha llegado a este mundo con la clara intención
de quedarse y, sobre todo, de llamar la atención
de todos los aficionados. Y es que no todos los días uno
hace su primera banda sonora y se encuentra con la nominacion
al
Goya
a la mejor partitura original.
Los chicos de BSOSpirit tuvimos el placer de disfrutar de una divertida velada en Madrid, cenando, charlando y compartiendo impresiones sobre los misterios de este mundo que tanto nos divierte, el mundo de la musica de cine.
Despues
de varios minutos de tertulia
BSOSpirit (BS): ¿Quién es
Sergio Moure?
Sergio
Moure (SM): Pues
Sergio
es un gallego que nace en
A Coruña
en 1969, y que siempre se quiso dedicar a la música.
Mis padres son muy aficionados a la música clásica.
Recuerdo que se compraron un equipo de música
que sonaba maravillosamente, un
Grundig
(aún estoy buscándolo porque lo quiero
tener), me ponían música clásica,
y recuerdo que un día mi padre me sentó en
el salón
y me puso la Sinfonía del Nuevo Mundo de
Dvorak. Ese momento puede que fuera
el comienzo de todo. Escuchaba
de todo, mis tíos "hippies" me ponían
a
los Beatles...
Y un día apreció mi padre con una guitarra,
me la dio, y aún no la he soltado.
Me
matriculé en la escuela de artes y oficios, porque
me gusta mucho todo lo relacionado con las artes -hasta
hice danza unos años- pero me di cuenta de que
siempre terminaba con la guitarra en las manos. Y entonces
dejé
A Coruña
y me fui a Barcelona a estudiar música en al Aula
de Jazz del Liceo. Tenía 20 años. Llegue
en 1991 y acabé en 19 97. Fue una etapa muy
bonita porque conocí a gente de todos sitios,
catalanes, andaluces, madrileños, y los que
no éramos
de Barcelona teníamos que trabajar en lo que se
podía, en bares, grabando música... Había
mucha camaradería...
Y
antes de acabar de estudiar ya sentía el gusanillo
por el cine. A mis padres les gustaba tambien mucho
el cine y me transmitieron esa afición. Cuando
me enteré de que en Barcelona estaba el
CECC y el ESCAC no tarde en irme para allá. Les
dije que quería
hacer cortos, que quería hacer música
de cine y comencé a colaborar con ellos.
BS:
¿Pero en tu formación musical no estudiaste
nada de música de cine?
SM: No, estudié las asignaturas comunes en el Aula,
luego podía enfocar mis estudios más a la
composición o la interpretación, y como
siempre me había gustado la composición,
tomé ese rumbo. Comencé a escribir para
cortos y para danza (en Barcelona hay mucha cultura de
danza contemporánea. Hice varias músicas
para danza y ganamos un premio nacional con una de ellas
para una compañía de allí), desempeñé
el rol de director musical de cortometrajes, y en el
ESCAC
comencé a impartir clase de música aplicada
a la imagen.
BS: ¿Entonces tu formación para poner música a la imagen es algo "autodidacta"?
SM: Sí. Tu puedes escribir algo maravilloso, pero
esa música tiene que adaptarse a una imagen , dar
el tono que el director y el guionista quieren -todos
sabemos cuántas partituras se han quedado fuera por no
dar con lo que el director o el productor imaginaban-.
Es muy importante para los músicos que queremos
hacer cine ver muchas películas, ver cómo está
puesta la música en la película, cómo está
compuesta, orquestada... No es lo mismo que unas notas la
haga un contrabajo que un bajo eléctrico, son
timbres y sonidos diferentes que inciden después
en la psicología de la imagen, y eso lo hice practicando
y observando.
BS: Y formaste la Sergio Moure Forum...
SM: Efectivamente, en Barcelona monté un grupo la Sergio Moure Forum. Interpretábamos temas míos. Éramos
diez, teníamos un cuarteto de cuerda, estaba yo
a la guitarra, tenía otra guitarra eléctrica,
un bajo, una batería, percusión y piano.
Grabamos un disco "De un tiempo a esta parte". Aprendí muchísimo porque tenía
un grupo moderno y uno clásico en la misma formación
y así estuvimos hasta que conocí a
Joaquín (Oristrell, el director de Inconscientes) en Barcelona.
BS: ¿Y cómo fue el encuentro?
SM: Me enteré que Joaquín estaba dando clases
de guión en la Universidad de Bellaterra
en Barcelona. Irrumpí en su clase y le dije que
quería hablar con él, y me dijo que esperara
al descanso. Y tras hablar un rato, en el descanso de
la clase, me dijo: "Barcelona para aprender, Madrid para trabajar" (porque a él también le pasó eso),
y como en Barcelona creía que ya no tenía
nada más que hacer,
Paloma (su mujer) y yo decidimos venir a Madrid.
BS: ¿Podrías hablarnos algo más de tus cortos? SM: Sí, claro. Eran muy variados, el primero fue "Juanito va agafar el seu fusell" de Alexis Racionero, el hijo de Luis Racionero, el escritor. Lo cierto es que estaba muy bien rodado, pero no tan bien interpretado. Después hice "La Comida de Mario Durán" y, bueno, la música era muy escasa, un poco al principio, al final y algo de relleno.
BS: Antes has hablado de que has trabajado en danza, ¿Cuál es el proceso de creación en una danza? SM:
El coreógrafo tiene en la cabeza una historia,
unos pasos que tiene que dar. La música y la coreografía
se tienen que crear a la vez. Te dicen cuanta música
quieren y el compás en el que va. Quedaba cada
semana o cada 4 días con el coreógrafo,
e íbamos afinando la música. Asistía también
a los ensayos, y así me empapaba de lo que se quería
hacer. Así captaba mejor la idea de lo que se necesitaba.
BS: ¿Te gusta usar los sintetizadores para componer? SM:
Me gusta usar el sintetizador para desempeñar el
papel de un sintetizador, no para simular un bajo eléctrico
por ejemplo. Ahora bien, si no hay dinero o te obligan
a usar un sintetizador para simular una orquesta, eso
es otra cosa.
BS: Háblanos de tus trabajos para
televisión y publicidad.
SM: Cuando
estaba en Barcelona conseguí trabajar
para
TV3, y allí hice carátulas
para televisión
y alguna música para el programa "Cifras
y Letras", de la
TVE
en Cataluña. pero poca cosa más.
BS: ¿Has hecho algo para teatro? SM: Sí, teatro sí que he hecho. Con mi amigo Emili Baldellou hice "Historias para ser contadas". Lo cierto es que me gusta mucho el cine, pero no quiero dejar de hacer música para otras disciplinas, y el teatro es una de ellas.
BS: ¿Y el musical? SM: No, quizás el teatro musical sí, pero no los musicales. Me gusta mucho Bob Fosse, "All that Jazz", "Cabaret", pero por ejemplo el "Fantasma de la Opera" no lo soporto. Recuerdo que Oristrell me preguntó en el estreno de Inconscientes
que cómo que no me gustaban los musicales. De hecho no
conozco a mucho músicos a los que les gusten los
musicales. Creo que son demasiado relamidos.
BS: Y llegamos al cine, a tu debut con Inconscientes, ¿cómo
llegaste a este proyecto?
SM: Como
te he comentado, hablé con Oristrell en Bellaterra,
y me vine a Madrid. Le llamaba de vez en cuando para preguntarle si
tenía
algo, le enviaba maquetas, y un buen día me comentó la sinopsis
de Inconscientes.
Trabajé sobre esa idea en casa durante unos 20
días y le entregué una maqueta de unos
4 minutos con los esbozos que capté. Se la entregué una
tarde y, por la noche, cuando miré el correo
electrónico
vi un "OK" enorme. Ese fue uno de los momentos
profesionales más dulces que he tenido.
A partir de ahí quedé con él, esperamos
a que se resolvieran los problemas de producción
que existieron. El productor de la película
quería
a un compositor extranjero, creo que a Lalo Schifrin.
Estuve en la cuerda floja muchísimo tiempo, pero
Joaquín me quería a mí y luchó mucho
para que yo pusiera la música. La producción
comenzó con 6 meses de retraso, por problemas
de financiación... que sí yo era novato,
que si se necesita una orquesta sinfónica
y no había
dinero...
BS:
Lo de casi siempre...
SM:
Luchamos también por el orquestador, fue todo una
lucha. Querían que sólo fuera yo a
Praga, preguntaban que para que quería que fuera el
orquestador, y todo por ahorrar un viaje.
Joaquín
me confirmó a finales del 2001 y la película
se comenzó a rodar a finales del 2003. Fui al rodaje
para conocer este mundo del cine. Escribí las maquetas
del
Vals
y el
Tango
porque se necesitaban para el rodaje y tenían que
rodar con ellas. Me las pagaron y aún así
no sabía si iba a poner mas música.
BS: ¿Pagaste la novatada al escribir música que se te rechazó? ¿Tuviste que hacer música adicional? SM: No, Joaquín
venía a casa, hablábamos y decidíamos
qué había que componer y en dónde. Yo hacía
previamente un trabajo de edición musical y
Joaquín
normalmente coincidía conmigo. Tenía total
libertad. La verdad es que sólo escribí
la música que se iba a usar y además, no
tuve que cambiar nada.
BS:
¿Cómo compones?
SM:
Al ser guitarrista, comienzo con la guitarra, pero claro,
al armonizar y orquestar tengo que usar el piano porque
tiene más octavas. Además, me gusta investigar. Es algo que aprendí en un curso de
José Nieto al que asistí. Por ejemplo, yo le iba a poner un
bandoneón al tango, me informé preguntando
a un amigo mío argentino y me dijo que en el año
1913 el bandoneón no estaba integrado en el tango,
por lo que lo sustituí por la guitarra.
BS:
Como guitarrista que eres, ¿coleccionas guitarras?
SM: Tengo varias guitarras, la eléctrica, la española,
la acústica... cada una cumple su misión,
pero no las colecciono. Además, para mí es
un poco incordio cambiar las cuerdas de las guitarras,
con más sería angustioso.
BS: ¿Qué momento fue el más bonito de componer
en Inconscientes?
SM:
Cuando
León
le confiesa al protagonista que va a matar a Freud. Son
6 minutos de muchos cambios de secuencia, de ritmos, aunque
también fue la que más disfruté.
Me gusta mucho también el momento en el que se intercambian
la ropa los protagonistas. .Joaquín,
de hecho, montó la imagen sobre la música,
es una secuencia en la que la música toma muchísimo
protagonismo.
BS:
¿Cuándo empezaste a sentirte compositor
de música de cine?
SM:
Cuando realmente supe lo que se me venía encima fue cuando
me senté en Praga y vi a la orquesta sinfónica
con 70 músicos. Yo había trabajado con cuartetos.
Fue algo impresionante, me quedé con la boca abierta.
Tanto fue así que
José Luís Crespo, el ingeniero de sonido, me preguntó: "¿Por qué compás van?". Y no sabía ni qué me decía. Estaba alucinando. Fue en ese momento cuando me di cuenta que había dado el salto.
BS:
¿Que nos puedes decir de tu equipo en Inconscientes?
SM:
El productor musical soy yo, el ingeniero de sonido es
José Luís Crespo. Es el ingeniero de sonido de
Alberto Iglesias. Es un tío muy bueno, trabaja sobre todo el jazz.
Trabaja
con Alejandro Sanz, Paco de Lucía,
y también ha sido el ingeniero de sonido de Mar Adentro. La orquestación ha corrido a cargo de
Ernesto Briceño, un venezolano amigo mío, maravilloso violinista
que ha tocado con
Peter Gabriel, con Celia Cruz, y aparte de eso es un tío maravilloso. Es tan
buen músico como persona. El copista es
Pablo González. , No lo conozco personalmente, pero
Ernesto
lo contrató y me parece que ha hecho un gran trabajo.
Quisiera también hablar de
Constanza Rivas, una cantante que canta jazz maravillosamente. Me
la presentó un amigo común... me gustaría
contar con ella en futuros proyectos, pues es una cantante
con muchos registros.
La Sinfónica de Praga tiene una sección de cuerda buenísima,
unas personas encantadoras, personas muy trabajadoras
y que se concentran mucho, y parecerá una tontería,
pero no les molesta grabar con metrónomo, y eso
ayuda.
BS:
Háblanos de Ernesto Briceño
.
SM: Al orquestador, Ernesto Briceño, lo conocía de Barcelona, estudió en el Berklee College of Music y vino muy preparado, tanto para escribir como para orquestar y para dirigir, y por eso quise que él dirigiera a la orquesta. Yo, echándole mucha cara, me podría haber puesto al frente de la Sinfónica de Praga, pero no hubiera quedado igual.
BS: Además el control de la grabación que tendrías en la cabina sería mejor que si estuvieras dirigiendo.
SM: Claro, estaba en comunicación permanente con Ernesto, le decía: "Oye Ernesto, esto está mal", y entonces se repetía la toma.
BS: ¿La labor de tu orquestador
ha sido importante ante este primer desafío?
SM: Muy importante. Ten en cuenta que para mi Inconscientes ha
sido un Master. Yo enviaba en mp3 las maquetas a Ernesto
a Barcelona con mi orquestación, y él
me daba su opinión, me proponía:"esto
lo deberían hacer los chelos, o los contrabajos... ", él
controla muchísimo el proceso de
orquestación.
BS:
¿Y sales a grabar al extranjero por..?
SM: La orquesta sinfónica de Galicia ha montado un estudio en A Coruña para grabar bandas sonoras. Es una pasada lo que han montado. Ríete tú de los Smekitz
que parecen un garaje (sobre todo es como si el tiempo
nunca hubiera pasado por allí, por Praga). Pero
es que en Praga se cobra 60 euros por músico por
4 horas de sesión, y en España se cobra
300 euros por lo mismo. Multiplícalo por el número
de número de músicos y verás porque
no se puede grabar en España.
BS:
Pero es que a eso se le añade que la Sinfónica
de Praga no suena nada mal... SM: Suena que es una maravilla, de lo único que nos quejamos un poquito es que habíamos reservado tres sesiones de 4 horas con media hora de descanso cada una. Por cada toma que tocábamos se hacían varias pasadas, ensayaban, grabábamos y tocaba descanso, y cuando volvíamos los músicos eran otros, te podrían haber cambiado unos 20 músicos. Allí se querían repartir el dinero entre todos y se rotaban. Por ejemplo, el primer violín cambió tres veces.
BS: Y a pesar de eso, ¿el resultado fue el óptimo?
SM: Sí, quizás lo más flojo fueron las maderas, los clarinetes. Los violines y pianos eran muy buenos. Y las maderas eran flojas, no por los músicos, sino por los instrumentos. En Chequia tienen tradición con los violines, pero con los clarinetes y el viento no tienen tanta tradición. En Inconscientes hay mucho clarinete solista, y hubo alguna toma que se tuvo que repetir entera porque estaba medio tono por encima. También el pequeño homenaje que le hago a Morricone con la trompeta se tuvo que repetir con otro músico, porque la primera vez no quedó bien. Pero, eso sí, la cuerda es maravillosa, me encanta como quedo el Vals.
BS: ¿Qué sentistes la primera vez que cogiste el disco de Inconscientes y leíste: "Música original de Sergio Moure"? SM: Fue tremendo. Era la prueba física de todo este proceso, de un año de producción. Además, fue muy bonito porque Joaquín quiso que estuviera en las mezclas de la música. Llevé todo a Cinearte, y allí fuimos montando bobina por bobina. Joaquín y el montador, Miguel Ángel Santamaría, me escuchaban cuando proponía algo, hubo mucho diálogo y estuvo muy bien, aprendí muchísimo en el montaje.
BS: ¿Qué tal la distribución de la música de Inconscientes? SM: Pues regular. Inconscientes es un disco muy difícil de encontrar, ninguna tienda quiere comprar copias. Tengo a mi gente en A Coruña loca buscando un disco, y no hay manera. La FNAC de entrada lo rechazó, pero gracias a la nominación cambió de idea, El Corte Inglés tampoco quiere el disco, creo que sólo había 3 copias en toda España. Y bueno, ahí está Karonte luchando por distribuir los discos. Si no te llamas Bisbal no vendes.
BS:
Pues mete en tu próxima película a alguien
famoso cantando.
SM: Me lo ofrecieron para Inconscientes, me dijeron que el tango lo podría cantar alguien con nombre. Pero yo no veía por ejemplo a Luz Casal cantando el tango, veía desde el principio a Constanza.
BS: Por lo menos tenemos la suerte de que Karonte ha editado el disco. SM: Claro. Ahora sale Volumen 2 de música de cine español, de este sello, y en él hay un tema mio, el tango de Inconscientes. En el disco hay más autores que en el primer volumen. Al principio iban a ir un par de temas de cada autor, pero con tanto compositor, al final nos hemos quedado con un tema.
BS: ¿Crees que tras tu nominación al Goya eres más conocido? SM:
La nominación al Goya ha sido muy importante, desde
que me nominaron no he parado de hacer entrevistas. No
lo podría haber imaginado ni en el mejor de mis
sueños. Me han sacado en la Voz de Galicia, en
la portada del Extraordinario de la Voz de Galicia, cinco
veces en la televisión. Antes en Galicia teníamos
a
Manuel Balboa, pero desgraciadamente murió, y claro, ahora estoy
yo, y al no haber muchos más compositores de cine
gallegos, se me da un poco de protagonismo.
BS: ¿Llega la mañana de las nominaciones
y tú estabas?
SM: Estaba terminando un disco que he compuesto con Ernesto Briceño y sabía que el día 14 anunciaban las nominaciones. Paloma hizo un trabajo durante el mes previo para concienciarme de que no me iban a dar la nominación, no quería que me diera un palo, y la verdad es que jamás se me había ocurrido pensar que por mi primera banda sonora me dieran la nominación.
Recuerdo que ese día, sobre las 12:30 busqué en Internet las nominaciones y vi que Inconscientes tenía cinco nominaciones. Imaginé que serían para Luis Tosar, Joaquín..
y me puse a trabajar hasta que me llamó José
María Benítez y me dijo:
-"Felicidades nominado".
-"¿Nominado a qué?", le dije, "¿A canción?"
-"Qué no, a música original".
y dije:-"¡Dios mío, que ilusión!", y al momento ya me llamó Joaquín
y fue maravilloso.
BS: ¿De las nominadas a BSO, cuál es la que más te gusta? SM: Héctor. El maquinista no la he podido escuchar. Y Mar Adentro me gusta mucho.
BS: ¿Y que piensas de las votaciones? SM: El que voten la candidatura los músicos me parece magnífico, pero ya luego el Goya lo votan todos, y claro, ahí ya entran muchos factores.
BS: ¿Qué piensas del ganador del Goya a la mejor música de este año, Alejandro Amenábar? SM: Amenábar mira la música desde el cine, tiene esa visión. Cuando estaba mezclando Inconscientes nos encontramos con él. Ojalá todos los
directores tuvieran esa visión musical tan clara
como la tiene él. En largometrajes, Inconscientes es lo primero que he hecho, pues como he comentado, vengo
del mundo del corto y la verdad es que no puedes ni imaginarte
lo que piden. Por ejemplo, en una de las danzas a las que
puse música, los coreógrafos me decían:
"Quiero algo gris, tirando a violeta, una cosa como positiva", y claro, ellos te hablan de colores y sensaciones,
y traducir eso es difícil, es algo muy subjetivo.
Hay que reconocer una cosa, que en Estados Unidos saben trabajar
en equipo y la comunicación, por tanto, es más
sencilla.
BS: ¿Los Goyas te han abierto puertas? SM:
Sí, claro. Por ejemplo, ya he firmado la serie con Joaquín, "Diario de una abuela de verano", y Cargo, una producción hispano-británica que dirige Clive Gordon, con guión de Paul Laberty y con la participación de Peter Mullan, Daniel Brühl y Luis Tosar.
BS: ¿Te gusta innovar?
SM:
Si, por ejemplo, Cargo nada tiene que ver con Inconscientes. Es una película de terror. Lo que no me gustaría es encasillarme. Además, creo que eso iría en contra de mi concepto de músico de cine.
BS: La siguiente pregunta creo que ya está respondida: Un director español, europeo y americano:
SM: Joaquín Oristrell claro. Me gustaría trabajar con Víctor Erice, que me parece el Ingmar Bergman
español, es una maravilla. ¿Un director
europeo? Es difícil, pues hay tantos...
Roman Polanski tal vez, y americano, los hermanos Coen.
BS: ¿Te irías a Estados Unidos si te surgiera la oportunidad?
SM: Sí, pero no de forma permanente. Trabajaría
y vendría. Haría como
Morricone. No me veo viviendo allí, pero sí trabajando.
BS: Dinos un compositor actual que llame tu atención. SM: Un compositor que me gusta mucho es Thomas Newman, me parece un genio. Camino a la perdición, Cadena Perpetua...
claro que ahora se le achaca que todo suena a lo
mismo, Cadena de Favores, American Beauty, Erin Brockovich, Esencia de Mujer, con la que empezó ese sonido "Newman". Cadena Perpetua me impresionó mucho, además el actor de esa película es Tim Robbins y a mí personalmente me encanta como actúa.
BS: ¿Una película española? SM: El Sur, de Víctor Erice.
BS:
¿Una BSO española? SM: Piedras, de Pascal Gaigne, me gusta mucho.
BS:
¿Una frase para definir a Roque Baños?
SM: Un orquestador inabarcable.
BS:
¿A Illarramendi?
SM:
Un melodista y orquestador único. Me impacta la
forma de hacer melodías de Ángel.
BS: ¿José Nieto? SM: Un clásico.
BS: ¿Amenábar? SM: Lo que decía antes, es un tío que tiene una visión cinematográfica única en España.
BS:
¿Alberto Iglesias?
SM: Es un compositor muy contemporáneo en su forma de orquestar. Prima la armonía frente a la melodía. Sus bandas sonoras son para ver, y no para escuchar.
BS: ¿Lucio Godoy? SM: Un músico muy completo, un grandísimo orquestador y un maravilloso productor musical. Un compositor muy bueno.
BS: ¿Algún otro que quieras destacar? SM: Pues a Pascal Gaigne y Pablo Cervantes. Creo que Pablo, si le dan oportunidades, puede hacer grandes cosas. Es un diamante en bruto.
BS: ¿Una película extranjera? SM: Fargo.
BS: ¿Una BSO Internacional que te pondrías un domingo cuando te levantas? SM: Atrápame si puedes, de John Williams. Es una BSO muy moderna pero que fusiona lo moderno con lo clásico de una forma maravillosa. Me gusta mucho Williams, pero admiro profundamente a Danny Elfman. Eduardo Manostijeras me parece una obra maestra.
BS: ¿Y de lo que has oído este año? SM:
Este año me ha impresionado mucho Los Increíbles, el jazz y la animación es de lo que más
me gusta. Me encantaría hacer animación.
La música en una película de animación
desempeña además una función de sonorización.
En este género la música tiene un " algo" añadido.
BS: ¿Un género para componer?
SM: Me da igual, me gusta todo, componer un tango, un
vals, boleros... En cuanto a géneros cinematográficos,
me gusta mucho la comedia, pero la intriga también
me gusta, e
Inconscientes creo que tiene mucho de ambos géneros.
BS: ¿Te gustaría componer canciones para películas? SM: Sí, me encantaría. De hecho, voy a ver si vendo cinco canciones que tengo. Las hago porque me apetecen, no porque me las encarguen. Es algo que me gusta hacer, componer la música y la letra de las canciones.
BS:
¿A qué película le pondrías música?
SM: A La Delgada Línea Roja. Zimmer hizo una partitura maravillosa, pero la película es que me encanta. Por ejemplo, también me hubiera gustado hacer la música de Ran, de Akira Kurosawa, porque antes se me ha olvidado comentar que me encantaría hacer música para una película bélica, ya que es un género en el que se puede desarrollar la parte humana, el drama, la parte cómica en algún momento...
BS: ¿Qué piensas de Hans Zimmer y su forma de dirigir esa empresa que es Mediaventures? SM: Pienso que Hans Zimmer es un tío muy humilde. Si tiene a cinco ayudantes lo dice. Si tiene a otros compositores que le hacen música adicional, lo dice. Por ejemplo, me llama la atención que en Gladiator ponga a Lisa Gerrard delante de él.
BS: ¿Aficiones? SM: El cine, la música, la pintura, la danza... Todo lo que tenga que ver con el arte.
BS: ¿Y si te tienes que definir
con dos palabras?
SM: Pues no sé, puedo decir que me tomo muy en
serio lo que hago. Doy lo máximo que puedo. Intento ser
organizado.
BS: ¿Anécdotas? SM:
Pues una de Inconscientes, la que cuento siempre. Llego el primer día al rodaje, y se estaba rodando el Vals. Nadie me conocía. Era un plano-secuencia, el más caro de la película. El vals sonando, todos bailando, música muy clásica, sube la grúa hacia los actores que hacen de músicos y hay un músico tocando una guitarra. Entonces pegué un grito y claro, todos me miraron. El productor preguntó quién era yo. Joaquín le dijo que era el compositor y les tuve que decir que la cámara estaba enfocando a un guitarrista cuando realmente estaba sonando un violonchelo, y bueno, se volvió a repetir y todo muy bien.
BS: ¿Y que piensas de la afición que hay en España a la música de cine? SM: He tenido la suerte de ver a Morricone en directo, en Verona, dirigiendo la Orquesta Sinfónica de Roma y el coro. Estábamos Paloma y yo de vacaciones y coincidió que dirigía allí. Fue una gozada. La Arena de Verona estaba abarrotada de gente, de gente joven. La gente gritaba "Ennio, Ennio", parecía un concierto de Alejandro Sanz. ¿Te imaginas una plaza de toros llena, escuchando un concierto de Illarramendi?
BS: ¿Que
piensas de MUSIMAGEN (Asociación de
Compositores de Música para Audiovisuales)?
SM: Pues yo entré porque me lo comentó un amigo,
y muy bien. Estamos casi todos los compositores del medio
audiovisual. Ainoha, que es la chica que gestiona la
asociación es un encanto. Cuando he tenido problemas,
dudas con los contratos, derechos de autor, registro,
etc.., me han ayudado. Es como un círculo en el
que nos ayudamos todos.
BS: Leí en una entrevista que te hicieron que "lo importante de la música de cine es que se vea. Que son como los signos de acentuación de un texto y las imágenes correspondientes." Eso no lo opinan todos los compositores. Muchos opinan justo lo contrario, que la buena música de cine es aquella que no se percibe viendo la película pero que cuando sales de la sala, vas silbándola. SM: Y es así, yo eso no lo dije, Lo importante de la música de cine es que cuando tenga que estar detrás, esté, y cuando tenga que estar al frente, esté.
BS: Por último, ¿Conoces BSOSpirit? ¿Qué opinas de nosotros? SM: Hombre, me parece una iniciativa maravillosa, que gente como vosotros hagáis esta labor de forma altruista. Me parece increíble, y más viendo esa pasión que tenéis por la música de cine, a mí me conmueve.
BS: Muchas gracias, y hasta otra, que esperamos sea pronto. SM: Lo mismo digo. Un saludo a todos los aficionados de musica de cine que nos han seguido hasta aquí.
Entrevista
realizada por Eduardo González Joyanes y Julio
César Fernández (NeotheOne)
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