Laserblast

Título en español : El rayo destructor del planeta desconocido
Compositores : Band, Richard y Goldsmith, Joel
Año : 2005 (la película es de 1978)
Distribuidora : Buysoundtrax
Duración : 46:12

Buscando a Richard

Richard Band ha desaparecido casi por completo del panorama cinematográfico, centrándose en trabajos para televisión y videojuegos, pero se trata de un nombre que en los años ochenta y primeros noventa significó mucho para la afición por la música de cine. Su popularidad se debió por una parte a su prolífica labor en películas de terror y ciencia-ficción de bajo presupuesto para su hermano Charles, y por otra a las numerosas ediciones discográficas que iban recogiendo su obra. Charles sigue produciendo, pero en los últimos años las labores musicales se han desviado hacia otros autores entre los que llama la atención el nombre de Peter Bernstein ("Puppet Master Vs. Demonic Toys", 2004), aunque James T. Sale es el nombre más habitual.

Tal como queda expresado en el monográfico "Richard Band, Pesadillas Musicales" confeccionado por Marcus Rip y al que podéis acceder en BSOSpirit, sus ingeniosas composiciones para "Re-Animator", "Troll", "El pozo y el péndulo" y otros títulos le labraron la fama no sin cierta polémica debido a sus ocasionales fuentes de inspiración, pero a menudo demostraba tener inventiva y personalidad propia, por lo que sus nuevas obras eran como mínimo escuchadas. Para más detalles os remitimos al texto de Marcus, pero con una trayectoria de más de cincuenta composiciones, comprenderéis que muchos aficionados siguiéramos su carrera con atención, y que para nosotros resulte muy, muy interesante escuchar cual fue su primera composición para el cine, realizada en colaboración con Joel Goldsmith.

Tras la estela de "Star Wars"

En relación a la película, también hay que tener en cuenta que es una de las primeras producciones de Charles Band, un profesional que lleva ya más de doscientas obras a sus espaldas. De presupuesto bajísimo, y como oportuno intento de arrimarse a la estela dejada por "La guerra de las galaxias", acabó siendo la única película dirigida por un tal Michael Rae y sus mayores alicientes parecen ser la breve presencia de veteranos como Roddy McDowall o Keenan Wynn y los efectos especiales, por un lado los pirotécnicos con abundancia de explosiones y por otro los alienígenas a cargo del también veterano Dave Allen y elaborados con la técnica del "stop-motion".

El argumento gira en torno a Billy (Kim Milford), un adolescente al que excepto su novia, todos en su pueblo le han perdido el respeto. En un desierto cercano, una lucha entre alienígenas termina con la desintegración de uno de ellos; los otros se marchan pero olvidan recoger una poderosa arma que, encajada en el brazo, emite "el rayo destructor del planeta desconocido" del título español. Billy encontrará el arma y con ella irá castigando a los que lo despreciaban, pero la misma arma le va a ir transformando física y mentalmente en un ser desagradable y maléfico. Cuanto más la utiliza más se va transformando y mayor es la espiral de violencia y destrucción que le llevará a un desgarrador final de terribles consecuencias.

Tras esa anterior parrafada argumental tan elaborada y un cartel/portada de CD que parece anunciar una impresionante "Guerra de los Mundos" se esconde lo que podríamos denominar "una modesta pero entrañable producción de bajo presupuesto", o lo que otros simplemente calificarían como "cutre", "lamentable" o "infumable" película. No importa, y los responsables de Buysoundtrax lo saben. Aquí el gancho principal es el nombre de sus compositores, sobre todo el de Band, ya que Joel parece haberse anclado en el medio televisivo y con poca repercusión.

Talento pero pocos medios

Según las notas del prestigioso Randal D. Larson incluidas en el CD, el propio Band afirmó haber dispuesto de apenas cuatro o cinco días y un presupuesto de mil dólares para componer la banda sonora. La carencia de medios era compensada por el entusiasmo de los dos jóvenes (Band tenía 19 años y Joel 20), y hay que recalcar nuevamente que para ambos se trataba de su primera banda sonora.

El resultado, enteramente electrónico, suena hoy demasiado rudimentario, con un sonido tan primitivo que incluso produce cierto rechazo inicial en el oyente. Su tema principal ("Main Title") va aumentando en intensidad hacia cierta grandiosidad que resulta algo frustrada, pero la melodía acaba resultando pegadiza.

El orden de temas en el disco parece respetar el orden cronológico de la película, lo cual siempre se agradece, pero aparecen cinco cortes dispersos ("Billy's Radio #1", "Chuck's Radio #1", "Party Music",...) que recogen la música diegética que se escucha por las radios de los coches o con motivo de una fiesta; se trata de música pop-rock sin ningún efecto dramático y no es precisamente lo que buscamos los aficionados a la banda sonora, pero si sumamos sus duraciones sobrepasan un tercio del disco, así que ¡se hacen notar bastante! No me extrañaría que fuesen la parte que más guste a sus autores, o al menos a Richard; recordemos que a muy temprana edad formó parte de grupos de rock realizando giras por Europa (precisamente se enamoró de la guitarra en un espectáculo de flamenco en Madrid), así que por mi parte los escucho con respeto porque nos trasladan precisamente a los "primeros pasitos" del autor en la música. Curiosamente el texto del CD nos informa de que los mismos temas serían reutilizados cinco años después en "The House On Sorority Row".

Los momentos de intimidad ("Mom's Leaving", "Billy and Kathy" y sobre todo "Billy and Kathy Make Love") resultan breves pero muy agradables, y en ellos ya se apuntan (y por eso nos interesaba a algunos este disco) las maneras melódicas que Band desarrollará después en otros trabajos.

Si exceptuamos el irrisorio tema dedicado a la persecución de Billy por parte de la policía ("Deputy Chase"), más digno del cine mudo que de una película seria, el resto son temas de acción o de suspense que atraviesan sonoridades muy diversas y hacen evidente que ambos músicos iban experimentando con la tecnología; parecerá extraño, pero no es nada monótono y seguro que ambientan como pueden la evolución de Billy hasta su enfrentamiento con los extraterrestres que vuelven a buscar el arma. Destacaríamos los últimos tres temas del CD, que parecen los más elaborados y dejan mejor huella como temas para el género de ciencia-ficción, que al fin y al cabo es lo que buscarán otros posibles adquirentes del disco. Me permito aquí recuperar una acertadísima frase extraída del citado estudio de Marcus: "Band es todo un experto en los desenlaces de las películas en que trabaja". Pues parece que nuevamente se cumple.

Conclusión: para coleccionistas de Band o de ci-fi

La edición de Buysoundtrax es de mil ejemplares, y como viene siendo habitual con esta distribuidora, ha utilizado el gancho comercial de ofrecer las primeras cien unidades firmadas por Richard Band, quien también produce junto a Mark Banning y Ford A. Thaxton. Joel Goldsmith sólo aparece relacionado en los agradecimientos (los más malévolos pensarán que prefiere no recordar su primer trabajo) y se incluye un "In Memoriam" para Albert Band (padre de Charles y Richard), Jerry Goldsmith (también lo sabéis, el padre de Joel), la pareja protagonista (Kim Milford y Cheryl Smith) y los citados veteranos Roddy McDowall y Keenan Wynn.

Personalmente, la primera audición me decepcionó mucho por ese sonido electrónico que tenía tan olvidado. Pero sinceramente, tras darle varias oportunidades creo que he recuperado cierta sensibilidad ochentera que parecía dormida y ahora me resulta una obra simpática y muy aceptable dentro de sus posibilidades.

Para la calificación he optado por la figura de Jerry que indica "Regular" porque el conjunto tiende a lo mediocre, pero está claro que se debe más a la carencia de medios que a la labor compositiva, como posteriormente han demostrado sus autores. ¿Puede calificarse de "mala"? Seguramente, pero teniendo en cuenta las circunstancias de la producción, parece lo mejor de la película.

En cualquier caso parece obra destinada exclusivamente a los amantes extremos de la ciencia-ficción y a los que aprecian positivamente otros títulos de Richard Band. A estos últimos les digo: seguramente acabaréis escuchando más "Laserblast" que "Terrorvisión", "From Beyond" o "Castle Freak". Por si os sirve de referencia.

Lo Mejor: Poder acceder al bautismo de fuego de dos compositores y el tema principal; en serio, dadle varias oportunidades y se os quedará grabado para siempre.

Lo Peor: Ese sonido electrónico tan rudimentario y los temas de "source music".

El Momento: "Billy and Kathy Make Love", breve pero con el agradable sello melódico de Band que se aprecia en obras posteriores.

Heriberto Navarro